El servicio de seguridad nacional de Ucrania dijo el viernes que había interceptado una llamada telefónica que demostraba que un “grupo de sabotaje” ruso hizo estallar la estación hidroeléctrica y la presa de Nova Kakhovka en el sur de Ucrania.

La destrucción de la instalación el martes desató inundaciones masivas, lo que obligó a miles de residentes a huir y causó estragos ambientales.

El Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU) publicó un clip de audio de un minuto y medio en su canal de Telegram de la supuesta conversación, que presentaba a dos hombres que parecían estar discutiendo las consecuencias del desastre en ruso.

Reuters no pudo verificar de forma independiente la grabación. Rusia, que acusó a Kiev de destruir la presa, no comentó de inmediato sobre su contenido.

“Ellos (los ucranianos) no atacaron. Ese fue nuestro grupo de sabotaje”, dijo uno de los hombres en la grabación, descrito por la SBU como un soldado ruso. “Querían, como, asustar (a la gente) con esa represa”.

“No salió según lo planeado, e (hicieron) más de lo que planearon”.

El hombre también dijo que, como resultado, “miles” de animales habían muerto en un “parque de safari” río abajo.

El otro hombre en la línea expresó su sorpresa por la afirmación del soldado de que las fuerzas rusas, que estaban ocupando la represa luego de la invasión a gran escala de Rusia en febrero de 2022, habían destruido la planta hidroeléctrica y el embalse.

La SBU no ofreció más detalles de la conversación o sus participantes. Dijo que había abierto una investigación penal por crímenes de guerra y “ecocidio”.

“La intercepción por parte de la SBU confirma que la central hidroeléctrica Kakhovskaya HPP (Planta de Energía Hidroeléctrica) fue volada por un grupo de sabotaje de los ocupantes”, dijo la SBU en un comunicado. “Los invasores querían chantajear a Ucrania haciendo estallar la presa y organizaron un desastre provocado por el hombre en el sur de nuestro país”.

Cientos de ucranianos fueron rescatados de los tejados de las zonas inundadas el jueves. El gobernador de la región sureña de Kherson dijo que unos 600 kilómetros cuadrados de la región estaban bajo el agua.

“Al volar la presa Kakhovskaya HPP, la Federación Rusa demostró definitivamente que es una amenaza para todo el mundo civilizado”, dijo el jefe de SBU, Vasyl Malyuk, citado en el comunicado.

“Nuestra tarea es llevar ante la justicia no solo a los líderes del régimen del Presidente ruso Vladimir) Putin, sino también a los perpetradores comunes de crímenes”, dijo.