Este viernes el dirigente norcoreano Kim Jong Un, prometió hacer lo posible por aplicar los compromisos alcanzados con el presidente surcoreano Moon Jae-in durante la inédita cumbre que se celebra en la Casa de la Paz, donde se firmó el armisticio de 1953.
Las dos Coreas se coordinarán estrechamente para asegurarse de no "repetir el pasado desafortunado que vio como los anteriores acuerdos intercoreanos se quedaban en nada", declaró. "Podría haber en el camino contragolpes, dificultades y frustraciones", dijo, "pero no se puede alcanzar la victoria sin dolor".
La promesa llega luego de que ambas naciones lograrán un acuerdo para alcanzar "la completa desnuclearización" de la península y abrir una nueva era que ponga fin al estado de guerra entre ambos países.
"Sur y Norte han confirmado su meta común de lograr una península libre de armas nucleares a través de la completa desnuclearización", se explica en la declaración conjunta firmada por ambos líderes tras sus conversaciones en la militarizada frontera intercoreana.