Camiones de harina llegaron al norte de Gaza para su distribución en zonas que no han recibido ayuda en cuatro meses, reportó el domingo la prensa palestina, ante la inminente hambruna en el enclave y la prevista reanudación de las conversaciones de tregua entre Israel y Hamas en Qatar.
Un convoy de 12 camiones llegó a la zona el sábado -seis a la ciudad de Gaza y seis al campo de refugiados de Yabalia- con suministros que también se distribuirán en Beit Lahiya y Beit Hanún, dijeron medios de prensa y residentes.
El medio de comunicación Frente Interior, vinculado a Hamas, informó que la ayuda fue distribuida por los “Comités Populares”, un grupo que incluye a dirigentes de clanes poderosos de Gaza. Una fuente de Hamas dijo que la ruta estaba protegida por personal de seguridad del grupo.
Las agencias de ayuda han advertido que algunas zonas de Gaza ya enfrentan una hambruna, y los hospitales del norte informan que hay niños que mueren de desnutrición y deshidratación.
La crisis de hambruna ha aumentado la presión internacional sobre Israel, que lleva más de cinco meses de campaña terrestre y aérea en Gaza, desencadenada por el ataque de Hamas del 7 de octubre. Se esperan más conversaciones para un alto el fuego y un intercambio de rehenes en los próximos días.
Un ataque israelí durante la noche dejó 12 muertos en una casa de Deir al-Balah, en el centro de la Franja de Gaza, según el Ministerio de Sanidad, que agregó que unas 92 personas fallecieron en las últimas 24 horas.
El objetivo de guerra declarado de Israel es acabar con Hamas, y ha dicho que esto sólo puede lograrse con un asalto a Rafah, en la frontera con Egipto, el último lugar relativamente seguro para los civiles que han acudido en masa a los campamentos desde otras partes de Gaza.
Los aliados occidentales de Israel le han advertido que no ataque Rafah a menos que pueda proteger a los civiles, pero la oficina del primer ministro Benjamin Netanyahu dijo el viernes que había aprobado los planes para un asalto.
Hamas presentó la semana pasada una nueva propuesta de alto el fuego que incluía un intercambio de rehenes israelíes y prisioneros palestinos.
Netanyahu ya ha dicho que la propuesta se basa en “exigencias poco realistas”, pero un funcionario palestino familiarizado con los esfuerzos de mediación dijo que las posibilidades de un acuerdo parecían mejores con Hamás habiendo dado más detalles sobre el intercambio de prisioneros propuesto.