Aunque alguna vez se pensó que podría convertirse en sucesor del trono castrista, poco se conocía de la vida privada, adolescencia y juventud del hijo mayor del fallecido líder revolucionario cubano Fidel Castro Ruz, Fidel Castro Díaz-Balart, quien se suicidó el jueves a los 68 años luego de recibir tratamiento médico durante varios meses por una depresión.
Sin embargo, Juan Reynaldo Sánchez, quien fue escolta personal de Fidel Castro entre 1968 y 1994, conoció de cerca a "Fidelito", como era conocido en la Isla el primogénito del ex presidente cubano.
En un artículo publicado en 2012 en el portal Café Fuerte, Sánchez -quien falleció en mayo de 2015 y un año antes publicó el libro "La cara oculta de Fidel Castro"- entregó detalles sobre la vida de Castro Díaz-Balart. Tras el divorcio de sus padres en 1954, "Fidelito" residió hasta los 10 años con su madre, Mirta Díaz-Balart, quien volvió a casarse con el abogado Emilio Núñez Blanco.
Sánchez relata que el hijo mayor de Fidel retornó a Cuba con el triunfo de la revolución liderada por su padre en 1959, cuando apenas tenía 10 años de edad. "Hay varias versiones sobre este regreso; una de ellas, la que más he oído, es que Fidel Castro lo llevó a la Isla y nunca más lo regresó al lado de su madre, Mirtha Díaz-Balart. Si hubo o no reclamaciones por parte de Mirtha no lo sé, pero lo cierto es que 'Fidelito' se quedó en Cuba", escribió Sánchez.
"Pero quedarse en Cuba no significa específicamente que en estos años estuvo al lado de su padre, ni que recibió el calor y cariño paternal", destacó el ex guardaespaldas de Fidel en el artículo. Según Sánchez, "José Raúl convivió más con su tío Raúl Castro que con su propio padre". "Conocí de esta historia cuando Fidel Castro Díaz-Balart ya vivía en el complejo habitacional de la Calle 26 en el barrio de Nuevo Vedado, lugar de residencia de la familia Castro-Espín, sus tíos y primos. Durante muchos años un oficial de la Seguridad Personal de apellido Fulleda era el encargado de atender todas las necesidades del adolescente, incluso en su etapa de estudiante que regresaba a Cuba en períodos vacacionales", detalla el ex guardaespaldas de Fidel.
Según Sánchez, la relación de "Fidelito" con su padre no era de las mejores. "La realidad es que Fidel Castro no se ocupaba de nada de lo relacionado con su hijo, raramente lo veía o conversaba con él, y esos contactos se hicieron aún más esporádicos en la medida en que fueron apareciendo otros hijos de la prole con su actual esposa, Dalia Soto del Valle". "A decir verdad, las relaciones de Dalia y Fidelito eran inexistentes. Dalia se portaba como una loba protegiendo a su manada, celosa con la prioridad para sus cinco hijos", prosigue.
En el texto, titulado "La desconocida historia de Fidelito, el primogénito", Sánchez asegura que "José Raúl -el nombre que Fidelito usó durante su estadía en la Unión Soviética- se crió sin el calor de una madre, que se radicó en Madrid desde 1959, y sin la atención que Castro debió darle como padre. De esa manera, Fulleda, el oficial a cargo, llenaba en cierto modo ese vacío afectivo".
Durante su estadía en la URSS, "Fidelito" cursó estudios en la Universidad de Lomonosov en Moscú y estuvo vinculado al Instituto Kurchatov, una prestigiosa institución de energía atómica.