El portavoz del secretario general de la ONU, Stéphane Dujarric, ha pedido este jueves a Egipto e Israel llegar a un acuerdo para la reapertura del paso de Rafah, en el sur de la Franja de Gaza y donde la parte palestina fue tomada a principios de mes por el Ejército israelí.
“Nos gustaría que Egipto e Israel y cualquier otra parte implicada llegasen a un acuerdo para que se reabran los pasos fronterizos”, ha declarado Dujarric durante una rueda de prensa en referencia a la decisión del Gobierno egipcio de negarse a reconocer “la legitimidad de la ocupación israelí” en el lado palestino del paso fronterizo de Rafah, exigiendo la presencia de “elementos palestinos en su lado del cruce para que Egipto continúe operando en su parte”.
Esta petición ha llegado como intento de reanudar el suministro de ayuda humanitaria al enclave palestino, que se ha visto reducido drásticamente desde el inicio de las operaciones terrestres israelíes en la zona.
“El cierre del paso fronterizo de Rafah y la limitada funcionalidad de Kerem Shalom en el sur han bloqueado el flujo de suministros vitales”, ha añadido el portavoz.
En ese sentido, ha explicado que diferentes agencias de Naciones Unidas como el Programa Mundial de los Alimentos (PMA) o la Organización Mundial de la Salud (OMS) han informado de que no se están distribuyendo alimentos en el sur y que los hospitales carecen de combustible y medicamentos por este cierre.
De hecho, el Hospital Kamal Adwan, en el norte de Gaza y asediado y atacado por tropas israelíes desde el pasado 19 de mayo, ha dejado de funcionar, según Dujarric.
Por otro lado, también ha aseverado que varias instalaciones de la ONU han sufrido daños durante la operación de dos días del Ejército de Israel en la ciudad cisjordana de Yenín, que ha dejado doce palestinos muertos, incluidos cuatro adolescentes, un médico y un profesor, además de graves daños materiales en la localidad.