El portavoz del secretario general de la ONU, Stepháne Dujarric, ha señalado este lunes que los bombardeos israelíes contra los aeropuertos sirios de Alepo y Damasco hacen peligrar la entrega de ayuda humanitaria en el país.

“Tiene el efecto inmediato de perturbar nuestro Servicio Aéreo Humanitario de Naciones Unidas (UNHAS), que opera tanto desde Damasco como desde Alepo. Hemos hablado a menudo de las enormes necesidades humanitarias en Siria. Necesitamos que esos medios aéreos puedan trabajar libremente para hacerlas llegar”, ha asegurado Dujarric durante una rueda de prensa.

“Recordamos a todas las partes que respeten sus obligaciones en virtud del Derecho Internacional, incluido el Derecho Internacional Humanitario, sobre la protección de no atacar infraestructuras civiles y civiles. Y de nuevo, creo que para evitar cualquier escalada, es importante que todos actúen con la máxima moderación”, ha añadido.

Al menos dos trabajadores civiles murieron el domingo tras un bombardeo israelí contra los dos principales aeropuertos de Siria, el de la capital, Damasco, y el de Alepo, que ha dejado ambas instalaciones fuera de servicio.

El Observatorio Sirio para Derechos Humanos, con sede en Londres, ha asegurado que los ataques no tenían como objetivo armas ni almacenes en los aeropuertos, que tampoco han llegado armas pertenecientes a las milicias proiraníes recientemente.

Además, ha recordado que se trata del tercer ataque israelí contra el aeropuerto de Alepo en diez días; desde comienzos de 2023, el Observatorio ha registrado 39 ataques contra posiciones sirias, que han dejado 72 muertos, 93 heridos y 84 objetivos destruidos entre edificios, almacenes de armas, municiones, cuarteles generales y vehículos.

Israel no se ha pronunciado sobre este ataque pero el Ejército israelí entiende que los aeropuertos sirios son empleados por milicias sirias para importar armas procedentes de Irán, enemigo declarado de Israel y participante activo en la guerra de Siria en colaboración con el Gobierno de Damasco.