* Política tecnológica

No importa quién gane las elecciones del 3 de noviembre, se espera que las poderosas empresas de tecnología enfrenten un mayor escrutinio. Un gobierno de (Donald) Trump probablemente mantendría, y posiblemente aceleraría, el escrutinio regulatorio a gran escala de las empresas de tecnología que marcó su primer mandato. Ese esfuerzo ha incluido acusaciones de sesgo anticonservador, investigaciones antimonopolio de gigantes de internet como Google y Facebook, y acciones contra aplicaciones de propiedad china como TikTok y WeChat. (Joe) Biden, el candidato demócrata, también ha criticado el poder de mercado de las grandes tecnologías y ha dicho que apoyaría una supervisión antimonopolio y reglas de privacidad en línea más estrictas.

* Política fiscal

Existe un enorme abismo entre los candidatos presidenciales en materia de política fiscal, con miles de millones de dólares en juego durante la próxima década. El Presidente Trump está haciendo campaña para continuar con el mayor logro legislativo de su gobierno, la ley tributaria de 2017, que redujo los impuestos a empresas e individuos al tiempo que aumentaba los déficits presupuestarios. Biden propone grandes aumentos de impuestos a las corporaciones y los ricos para pagar los programas sociales.

* Inmigración, muro fronterizo

La inmigración formó un tema central de la campaña del Presidente Trump en 2016 y desde que asumió el cargo, ha tratado de reducir casi todas las formas de inmigración a a Estados Unidos. Entre los cambios de Trump se encuentran la construcción del muro fronterizo, la prohibición de viajar desde varios países y un cierre temporal de la frontera sur a los solicitantes de asilo, mientras dure la pandemia de coronavirus. También intentó poner fin al programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA). Biden formuló su propia política de inmigración como una refutación de los términos de Trump, prometiendo deshacer casi todos los cambios que ha realizado el actual gobierno.

* Política exterior

El Presidente Trump y Joe Biden tienen profundas diferencias en áreas clave de la política exterior de Estados Unidos, como las actuales alianzas y las relaciones con Arabia Saudita e Irán. Pero ambos tienen puntos de vista similares sobre algunos objetivos importantes, como la limitación del despliegue de tropas en el Medio Oriente y Afganistán.

* China

El Presidente Trump ha trazado una política de China más conflictiva que la que siguieron sus predecesores republicanos y demócratas en las cuatro décadas desde que Washington y Beijing establecieron relaciones diplomáticas plenas. Es probable que esa línea dura continúe sin importar si Trump o su contendor demócrata Joe Biden ganan las elecciones presidenciales.

* Crimen y la injusticia racial

La policía, el crimen y la injusticia racial se han convertido en temas importantes en las elecciones presidenciales de noviembre, alimentados en parte por una serie de asesinatos y tiroteos de personas negras bajo custodia policial este verano (boreal). Trump y Biden han ofrecido diferentes respuestas a esos problemas.

* Comercio

La elección de Trump en 2016 condujo al mayor cambio en la política comercial de Estados Unidos desde la Segunda Guerra Mundial, ya que acumuló aranceles y evitó la construcción de alianzas. Una victoria de Biden podría cambiar de dirección nuevamente. Esto porque dice que atraerá a los aliados golpeados por las sanciones comerciales de Trump, repensará el uso de aranceles y tratará de crear un frente unido para enfrentar a China.

* Seguridad laboral

El ganador de la presidencia se enfrentará a un mercado laboral estadounidense que aún se está recuperando del impacto provocado por la pandemia de esta primavera, que puso fin a una década de crecimiento del empleo. Tanto Trump como el candidato presidencial demócrata Joe Biden prometen crear millones de puestos de trabajo, pero sus estrategias para lograr una recuperación total difieren.

* Política energética y climática

Las elecciones presidenciales de 2020 enfrentan a un candidato que hace del cambio climático una parte integral de su plataforma contra otro que descarta su importancia y se compromete a seguir impulsando una agenda desreguladora. La política ambiental es uno de los mayores contrastes entre el Presidente Trump y Joe Biden. Las empresas de energía, los fabricantes de automóviles y los sindicatos pueden ver cambios importantes si hay rotación en la Casa Blanca.

* Deuda estudiantil

El Presidente Trump y Joe Biden no están de acuerdo sobre cuánto de los $ 1,5 billones en deuda estudiantil federal adeudada por 43 millones de estadounidenses deberían ser perdonados y cómo financiar la universidad en el futuro.

* Regulación financiera

Joe Biden era vicepresidente cuando Barack Obama firmó la ley de regulación financiera Dodd-Frank en 2010. La legislación sigue simbolizando las diferencias políticas entre demócratas y republicanos en esta materia. Un segundo gobierno de Trump mantendría los esfuerzos para aliviar lo que considera las disposiciones excesivamente onerosas de la ley, mientras que un gobierno de Joe Biden es más probable que someta a Wall Street a un escrutinio más detenido.

* Atención médica

La mayoría de las diferencias entre el Presidente Trump y el candidato presidencial demócrata Joe Biden sobre atención médica se alinean en una disputa central: Trump quiere reducir el papel del gobierno federal en la atención médica de los estadounidenses, mientras que Biden quiere expandirlo.

* Acuerdos y alianzas internacionales

El aspirante presidencial demócrata, Joe Biden, ha prometido repetidamente volver a comprometer a Estados Unidos con alianzas globales y acuerdos internacionales que el Presidente Trump ha renunciado o criticado, destacando una gran diferencia en los enfoques de política exterior de los dos rivales.

* Medio Oriente

A medida que se acercan las elecciones del 3 de noviembre, el Presidente Trump ha estado presionando a más países árabes para que normalicen las relaciones con Israel. Pero independientemente de quién gane las elecciones, se espera que las perspectivas de una mayor normalización se vuelvan más desafiantes el próximo año. Si Trump gana la reelección, es posible que su cercanía con Arabia Saudita no sea suficiente para persuadir al rey saudita Salman de que establezca relaciones diplomáticas plenas con Israel. Si Biden gana, puede descubrir que sus esfuerzos por revivir el acuerdo nuclear de Irán de 2015 desestabilizarían a Israel y a los Estados árabes.