Las dos condiciones que pone Putin para un alto al fuego en Ucrania

El 24 de febrero de 22, el líder ruso Vladimir Putin reportó al mundo el inicio de una “operación militar especial” de su país en Ucrania. Esa jornada se reportaron una serie de bombardeos en varias ciudades y Kiev acusó invasión rusa “a gran escala”, iniciándose un conflicto armado que ya cumple 841 días.

Este viernes, en una reunión con los dirigentes y el personal superior del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, en Moscú, Putin planteó dos exigencias para dar fin a la guerra.

Su primera exigencia es que Ucrania retire sus tropas de las cuatro regiones ya anexionadas por el Kremlin.

La segunda es que la nación que lidera Volodimir Zelensky retroceda en sus intenciones de sumarse a la OTAN.

De ser acogidas esas peticiones, Putin planteó que cesaría el fuego, garantizando un retiro seguro de las tropas ucranianas, y entablaría conversaciones de paz.

“Tan pronto como Kiev anuncie que está dispuesto a esta decisión e inicie una retirada real de las tropas de esas regiones y también comunique oficialmente su renuncia a los planes a ingresar en la OTAN, se impartirá inmediatamente de nuestra parte la orden de cesar el fuego y comenzar negociaciones”, afirmó.

Al mismo tiempo, Putin advirtió de que “si Kiev y las capitales occidentales renuncian a esto, como en el pasado, serán al fin y al cabo responsables política y moralmente por la continuación del derramamiento de sangre”.

Según medios locales, Putin dejó claro que Rusia exige una Ucrania “neutral, fuera de bloques y no nuclear” junto a la desmilitarización y desnazificación del país, dos de los objetivos marcados cuando ordenó el inicio de la campaña militar en febrero de 2022.