Desde la guerra en Medio Oriente, con Gaza como escenario, hasta la guerra civil de Sudán, la organización humanitaria internacional Médicos Sin Fronteras (MSF) ha continuado sus esfuerzos por asistir en términos médicos a los miles de afectados que acumulan los conflictos armados del presente.

Haití, la frontera entre México y Estados Unidos y el rescate de personas en el mar Mediterráneo fueron otros de los lugares en el que prestaron ayuda durante 2024, y nuevamente presentaron el registro de las mejores fotografías de su labor humanitaria.

Se trata de 36 registros tomados entre diciembre de 2023 y el mismo mes, pero de 2024. En ellas muestran “los altibajos que experimentamos (y, por supuesto, los que experimentaron las personas a quienes ayudamos) mientras brindamos asistencia médica y humanitaria en más de 70 países”, explican en su sitio web.

Pero no solo es dolor lo que se retrata. También hay felicidad, resiliencia y alegría en algunas de las fotografías de la ONG internacional. “Muestran los puntos de ruptura, como cuando tuvimos que suspender nuestras actividades en la capital de Haití; pero también la resiliencia y la alegría, como cuando presenciamos a una madre conocer a su bebé por primera vez en Sudán del Sur. Estas fotografías muestran cómo el testimonio puede crear un punto de conexión entre seres humanos”, señala Médicos Sin Fronteras.

“La salud es una necesidad fundamental que nunca se debe dar por sentada, tal y como se retrata en cada una de estas fotografías”, cierran.

A continuación, una selección de algunas de ellas.

El complejo médico Al Shifa tras 14 días de asedio de las fuerzas israelíes en Gaza. Foto: MSF
Una caravana de migrantes escoltada por policías avanza por la ruta entre las localidades de La Venta y Juchitán, en el sur de México. Foto: MSF
Un paciente sufre fracturas en las costillas, lo que le dificulta la respiración, además de quemaduras en las piernas y las manos. Ihor recuerda que le explotó una mina. Le resulta difícil recordar los acontecimientos de aquel día. Foto: MSF
Ita Joice, de 27 años, conoce a su bebé, Juan, durante su cesárea en el hospital del condado de Mundari, el único centro de atención sanitaria secundaria de Kajo Keji, Sudán del Sur. Foto: MSF
Mientras compraba con su madre en un mercado cercano, esta niña de 20 meses fue alcanzada por metralla tras la explosión de una bomba que arrasó el barrio. Junto con otras víctimas, la niña anónima fue trasladada al hospital de formación de Bashair, en el sur de Jartum, Sudán. Durante la radiografía, una parte del cráneo de la niña cayó sobre la mesa. Un equipo de urgencias de MSF operó a la niña y consiguió salvarle la vida. Foto: MSF
Ezdihar al Diqa, de 39 años, vive en Dahieh y abandonó los suburbios del sur de Beirut con su marido y sus dos hijos la noche del 28 de septiembre tras recibir una alerta de bomba dirigida a su barrio. Mientras su marido se dirigía a un pueblo del Monte Líbano para acompañar a su madre, cuyo estado de salud le impedía permanecer en la ciudad, Ezdihar se quedó en la capital libanesa con sus dos hijos. Foto: MSF
Tras la explosión de un camión cisterna de combustible en Mirogôane, en Haití, el 14 de septiembre, numerosos heridos fueron atendidos en diversos centros de MSF. Seis pacientes están siendo tratados actualmente en el hospital de traumatología de MSF en Carrefour. Los equipos de MSF trabajan duro para proporcionarles los cuidados necesarios. Uno de ellos, Kenol Coman, tiene quemaduras graves en varias partes del cuerpo. Foto: MSF
El 8 de junio de 2024, siguiendo instrucciones de las autoridades italianas, los 11 cadáveres recuperados el día anterior en el mar Mediterráneo fueron trasladados por el equipo de Geo Barents a un buque de la Guardia Costera italiana cerca de Lampadusa. Foto: MSF
Palestinos desplazados en Rafah, en el sur de la Franja de Gaza, llevan sus pertenencias mientras se marchan tras una orden de evacuación del Ejército israelí, el 6 de mayo de 2024. Foto: MSF
Una enfermera camina por la sala donde los pacientes reciben la antitoxina diftérica (DAT) mientras un paciente se refleja en la puerta de cristal mientras habla con los visitantes en el Centre de Traitement Epidemiologique de Siguiri, Guinea. Los visitantes son bienvenidos en un aforo limitado, teniendo que permanecer detrás de una valla que crea una barrera de dos metros de ancho para evitar la propagación de la difteria. MSF ha ayudado a tratar a más de 2.100 pacientes hasta el 4 de enero de 2024, y lleva respondiendo a un brote de difteria en la región desde mediados de agosto, como no se había visto en el país en los últimos 30 años. Foto: MSF