Cuando faltan tres días para que asuma la Presidencia de Perú, Pedro Castillo ya comenzó a dar ideas de algunas propuestas para su gobierno durante su participación este fin de semana del congreso del partido Perú Libre, en el que tuvo hacer frente a las tensiones dentro de la colectividad y señaló que su presidencia iba a responder al pueblo y no a una colectividad.
Pedro Castillo asumirá el cargo el 28 de julio. Esto, después de que el Jurado Nacional de Elecciones puso fin el lunes pasado a la espera de 43 días en la certificación de los resultados electorales tras una segunda vuelta muy ajustada y empañada por acusaciones de fraude e irregularidades. Finalmente, el candidato de Perú Libre fue declarado ganador, tras obtener el 50,12% de las preferencias frente a la abanderada de Fuerza Popular, Keiko Fujimori.
En el congreso, el mandatario electo anunció que renunciará a su sueldo como jefe de Estado y que ejercerá el cargo con su remuneración de profesor. También afirmó que propondrá al Congreso que los sueldos de los ministros y congresistas sean reducidos en un 50%. “Invoco a la bancada que llegando nosotros a asumir este mandato, vamos a renunciar al sueldo presidencialista. Vamos a conducir los destinos de nuestro país con el sueldo de maestro”, expresó.
Si bien el anuncio recibió aplausos no dejó a todos contentos. La prensa ha señalado que existía una tensión entre quienes se identifican con la apertura política que proclama Castillo y quienes quieren un gobierno de izquierda dura. Según el diario La República, la mayoría de su bancada decidió respaldarlo frente a un ala dura que exigiría mayor apego a la línea ortodoxa y a Vladimir Cerrón, secretario general del partido.
Cerrón, fundador de Perú Libre, ya había advertido que el partido debía corregir al gobierno si se desvía del camino y que seguía en el esfuerzo de hacer una revolución y enfrentar a quienes se le oponen.
“En las tareas más difíciles tiene que estar el partido. Si el gobierno dice: ‘Vamos a pelear por una Asamblea Constituyente y necesitamos ir a un referéndum’, es el partido el que tiene que conseguir las firmas para llevarlo a la práctica. Si el gobierno está amenazado, compatriotas, es el partido el que tiene que organizar la resistencia. Y si el gobierno se desvía, camaradas, es el partido el que tiene que rectificar la línea”, indicó el dirigente.
“El partido ha ganado solo el asiento de Palacio. Tenemos que construir el poder, todavía no hemos ganado nada, empezaremos recién la tarea de construir ese espacio de gobierno de poder. Como dicen, tenemos una condición especial, que es este triunfo electoral, pero no es haber triunfado todavía sobre el sistema”, dijo.
Desde que Castillo salió elegido Presidente comenzaron a surgir los cuestionamientos sobre que Cerrón sería el verdadero gobernante, algo que Castillo ha negado y ha tratado de dar señales de su liderazgo. En ese sentido, durante su discurso, Castillo agradeció el apoyo de Perú Libre en la campaña, pero dijo que no estaba obligado a seguir posiciones radicales, que la Constitución se cambiará “si el pueblo lo pide”.
Según La República, el ala dura de la bancada sería minoritaria y la mayoría habría comprometido su respaldo a Castillo, aunque su apertura política no sea del agrado de los más ortodoxos de Perú Libre.
En este contexto, la última encuesta del Instituto de Estudios Peruanos (IEP), publicada este sábado en La República, reveló que un 85% de los ciudadanos no quiere que Cerrón participe en el próximo gobierno de Castillo los siguientes cinco años. Por el contrario, solo un 7% se mostró de acuerdo con que el exgobernador de Junín involucrado en presuntos actos de corrupción tenga alguna participación en la gestión del docente cajamarquino.
Por otro lado, Castillo anunció la “formación de una coalición por la gobernabilidad” con la presentación de una lista multipartidaria para la Mesa Directiva del Congreso que hoy será elegida. La lista, en orden de jerarquía, está conformada por José Enrique Jerí (del partido centroderechista Somos Perú), José María Balcázar (Perú Libre), Ruth Luque (del centroizquierdista Juntos por el Perú) y Flor Pablo Medina (no agrupada, candidata del centrista Partido Morado). Jerí, abogado de 34 años, no había sido electo, pero entró a la Cámara tras la inhabilitación del expresidente Martín Vizcarra por el escándalo de las vacunas.
Perú Libre consiguió en las elecciones de abril 37 escaños del total de 130, una cifra que le complica el camino para conseguir el respaldo para aprobar sus promesas de gobierno. Se estima que junto a los congresistas de las otras bancadas de la lista, llegaría a 50 votos, por lo que dependería del apoyo de otras colectividades para concretar su presencia en la Mesa Directiva.
De acuerdo al Reglamento del Legislativo, “terminado el escrutinio, el Presidente (de la Junta Preparatoria) proclama miembros electos de la Mesa Directiva a los candidatos de la lista que hayan logrado obtener un número de votos igual o superior a la mayoría simple de congresistas concurrentes”.
“Si ninguna lista obtiene la mayoría simple se efectuará, siguiendo el mismo procedimiento, una segunda votación entre las dos listas con mayor número de votos”.