Cuatro meses después de recibir al presidente Javier Milei en su residencia de San Salvador, Nayib Bukele devolvió el gesto, realizando una visita de cinco días a Argentina que concluyó la noche de este martes. Aunque el Presidente de El Salvador estaba en Buenos Aires desde el jueves pasado, mantuvo una agenda privada hasta este lunes, cuando se reunió con su par transandino en la Casa Rosada, encuentro que afianzó su admiración mutua. “El salvadoreño conoce bien Buenos Aires de los tiempos en que acompañaba los estudios universitarios de su esposa en la capital argentina”, recordó el diario El País.

El encuentro de Bukele con Milei, en visita de Estado, confirmó la “sintonía política e ideológica” cimentada durante aquel primer encuentro, cuando el salvadoreño asumió su segundo mandato, destacó el diario porteño La Nación. Sintonía reforzada, dos semanas después del encuentro de presidentes, con la visita a El Salvador de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, admiradora confesa del plan de combate a la delincuencia que Bukele puso en marcha durante su primer período de gobierno.

Ambos mandatarios se reunieron a puertas cerradas y no hubo conferencia de prensa conjunta, destacó El País. Pero testigos del encuentro en la Casa Rosada comentaron a La Nación que “fue una reunión excelente, muy dinámica. Se habló de las coincidencias entre ambos presidentes”.

La seguridad también formó parte de la conversación ampliada entre ambos presidentes y los ministros participantes, indicó el periódico argentino. De hecho, a la par del encuentro entre Milei y Bukele, la ministra de Seguridad argentina, Patricia Bullrich, compartió actividades con su par Gustavo Villatoro. Este último dijo que sus equipos técnicos mantienen reuniones quincenales para intercambiar conocimiento en la materia.

En junio de este año Bullrich viajó a El Salvador para saber más del modelo aplicado en la lucha contra las pandillas y el crimen organizado, que tuvo como resultado la firma de un convenio de cooperación con “capacitaciones conjuntas entre las fuerzas de seguridad” y la creación de “un laboratorio de políticas de seguridad para llevar números actualizados de Argentina, El Salvador y cualquier otro país que decida adherir al mismo”, según consigna CNN en Español.

Este martes Bukele se reunió con un grupo de senadores en el Congreso argentino, donde fue consultado sobre cómo logró reducir la violencia en El Salvador y cómo dar incentivos para la reinserción de los presos. El mandatario, consigna el diario salvadoreño El Mundo, dijo a los senadores las seis fases del Plan Control Territorial y el régimen de excepción. “Nosotros entendimos a la fuerza, con golpes, que la única forma era ir tras el pandillero y arrestarlo, no para castigarlo sino para sacarlo de la sociedad”, aseguró.

“Según lo que se anunció, se trabajaron muchos temas de seguridad e inteligencia, donde Argentina tiene un gobierno de la denominada Nueva Derecha, que está muy orientado a los temas de seguridad. La ministra Patricia Bullrich declaró, en más de una oportunidad, que quiere tomar el modelo Bukele para combatir a los vendedores de drogas, etc., sobre todo en el Gran Rosario, que es donde hay un problema en este momento, medio parecido a lo que pasa en Chile en torno al puerto de San Antonio. Creo que tiene un componente político importante, porque el modelo Bukele tiene mucha popularidad en América Latina a nivel social. Y Bukele se convirtió en una figura popular y conocida más allá de Centroamérica”, comentó a La Tercera Julio Burdman, politólogo de la Universidad de Buenos Aires.

La seguridad es el asunto que más interesan a Milei y a su ministra del área, Patricia Bullrich, apunta El País. Defensora de la mano dura contra el delito, Bullrich visitó hace cuatro meses en El Salvador el Centro de Confinamiento del Terrorismo, la cárcel que Bukele exhibe al mundo como la evidencia de su éxito contra las pandillas. “Desde que Bukele es presidente todo ha cambiado de una manera impresionante. De ser uno de los países más inseguros del mundo a ser uno de los más seguros. Felicitaciones, Bukele”, dijo entonces la ministra.

El Presidente de El Salvador, Nayib Bukele, habla con los medios mientras asiste a un evento en el monumento al Libertador General San Martín, en Buenos Aires, el 30 de septiembre de 2024. Foto: Reuters

De hecho, en el marco de la visita de Bukele, Bullrich y Villatoro firmaron una declaración conjunta para el “compromiso y la cooperación” entre ambos países en la lucha contra el crimen organizado, según informaron este martes fuentes oficiales. La ministra de Seguridad de Argentina celebró en su cuenta de X el “acuerdo histórico” con El Salvador, que “refleja un cambio de paradigma en la lucha contra el narcoterrorismo”, y afirmó que “esta nueva doctrina revolucionaria” se basa en “varios principios fundamentales”, entre los cuales indicó que están “del lado de las víctimas, nunca de los victimarios” y por eso combaten a los criminales “con toda la fuerza del Estado”.

“Generar algún tipo de alianza”

El canal de YouTube del gobierno de El Salvador siguió la visita en directo, señala el diario español. “Muchos argentinos reconocen a Bukele. Ven en él a un líder de importancia global, se observa que aquí en El Salvador tenemos a un dirigente de talla mundial. Se encuentra en Argentina el presidente mejor valorado en todo el mundo”, repetían los presentadores oficiales durante la transmisión. El punto de vista en El Salvador coincide con el que Milei se reserva para sí mismo. “Adonde voy soy una sensación, soy el político más popular del mundo”, repite el mandatario argentino en cada entrevista.

“Creo que en ese marco está la cuestión de generar algún tipo de alianza”, comenta Burdman sobre la visita de Bukele a Argentina. “Porque Bukele es hoy un referente de esta Nueva Derecha, pese a que él es un caso con un perfil particular, porque no comparte todos los mismos valores de la Nueva Derecha, pero quedó en ese grupo y asiste a las internacionales conservadoras”, agrega.

El Presidente de Argentina, Javier Milei, saluda al Presidente de El Salvador, Nayib Bukele, a su llegada a la Casa Rosada en Buenos Aires, el 30 de septiembre de 2024. Foto: Reuters

Y destaca: “Milei se plantea como el líder de la derecha en América Latina, en un contexto en el cual en la mayoría de los países gobiernan la izquierda y la centroizquierda. Milei se posiciona como un líder capaz de tener aspiraciones de representar a la corriente de la Nueva Derecha a nivel mundial, hace todo el tiempo ostentación de ese rol que él tiene. Creo que hay un interés político personal de Milei, que probablemente sea compartido con Bukele, de potenciarse mutuamente como figuras populares en la región. Los principales componentes acá son el político y el tema, obviamente, de seguridad, que tiene también toda una connotación muy política, porque claramente el problema de Argentina no tiene, como el de Chile, nada que ver con la cuestión de El Salvador”.

Hace una semana, Milei y Bukele coincidieron en la Asamblea General de las Naciones Unidas y pronunciaron discursos en el que postularon su visión antiglobalista. Mientras el líder argentino acusó a la ONU de promover “políticas colectivistas (…) bajo el mandato de la Agenda 2030″, el salvadoreño dijo que el mundo “está dividido, preocupado, hostil y sin esperanza”. Además, Argentina y El Salvador fueron dos de los 15 países que se abstuvieron de apoyar el Pacto para el Futuro.

Milei y Bukele son dos líderes de alto perfil internacional que se venden como “outsiders”, es decir, políticos que no vienen del establecimiento. Si bien sus recorridos son muy diferentes, ambos llegaron al poder con un discurso contra las élites: Milei, apuntando a la que llama la casta política -los políticos tradicionales que, según él, son culpables de la decadencia argentina-; Bukele, con una frase como bandera: “El dinero alcanza, cuando nadie está robando”, recuerda CNN en Español

Asimismo, la cadena de televisión destaca que ambos se manejan en redes sociales como peces en el agua, que son parte central de su comunicación de gobierno. La contracara es su vínculo con la prensa: en uno y otro país, numerosas organizaciones de derechos humanos y de periodistas denuncian ataques a la libertad de expresión y restricción a la información pública. En tanto, sus políticas económicas son prácticamente opuestas, asegura. Así, mientras que Milei apuesta a la reducción del Estado y el ajuste fiscal, Bukele sostiene políticas sociales como subsidios tarifarios y control de precios en distintas industrias.

Al respecto, Burdman señala que “puede haber también algún interés de parte de Argentina en El Salvador como modelo monetario, porque para todo el sector ultraliberal, que lidera Milei, ese modelo con una dolarización de facto y la formalización del uso de las criptomonedas resulta como atractivo, más allá de su aplicabilidad o no”. “Así que por ahí también hay una suerte de ganas de estar cerca”, concluye.