“La firma del Acuerdo Marco Avanzado y el Acuerdo Comercial Provisional entre la UE y Chile es una excelente noticia (…) El 99,9 % de las exportaciones de la UE a Chile estarán exentas de aranceles. Como contrapartida, los productos de Chile disfrutarán de un acceso más expedito al mercado único de la UE”, comentó la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, tras la firma este miércoles en Bruselas de la modernización del Acuerdo de Asociación rubricado en 2002 entre el bloque y nuestro país, con el objetivo de contar con un marco institucional actualizado para hacer frente a los nuevos desafíos.

En conversación con La Tercera, el embajador de la UE en Chile, León de la Torre, comentó sobre los detalles de la modernización del Acuerdo de Asociación y el impacto que tendrá en las relaciones bilaterales.

¿Qué impacto tiene la actualización de este acuerdo tanto para la Unión Europea como para Chile?

Sin duda es una buena noticia para ambas partes. Un buen acuerdo tiene que satisfacer a ambas partes y este acuerdo es un producto de una negociación de casi cinco años que ha encontrado ese punto de equilibrio en el que convergen los intereses de ambas partes. Y creo que es una señal clarísima de confianza y de apoyo de la Unión Europea hacia Chile, de una confianza política, una confianza estratégica y también comercial y de inversión.

Es un Acuerdo de Asociación actualizado y profundizado, un Acuerdo Marco Avanzado que va a mejorar todavía la coordinación política, la estrecha relación que tenemos en muchísimos ámbitos, va a abrir nuevas oportunidades comerciales con importantes reducciones de los aranceles, más del 99%, y con nuevas áreas de economía digital, contrataciones públicas, etcétera.

Y desde luego también se supondrá un nuevo impulso a la inversión que ya es fundamental. La Unión Europea, la suma de los Estados miembros, representan la primera inversión extranjera en Chile y este nuevo acuerdo establece un nuevo mecanismo de protección de inversión que estamos seguros va a traer nueva inversión a Chile.

Creo que es una muy buena señal, un espaldarazo, diría yo, de la Unión Europea a esa relación y que Chile en América Latina, una vez más, es el pionero, el primero en tener esa relación tan estrecha con la Unión.

Usted se refirió a nuevas áreas de inversión. ¿Qué áreas específicas le interesan a la Unión Europea en Chile?

Yo creo que la inversión de la Unión Europea en Chile se caracteriza por ser una inversión de larga data y con vocación de permanencia, y que ha ido viendo y apoyando al país a crecer. Y creo que eso es lo que el nuevo acuerdo va a seguir fomentando. Se van a sustituir los 15 acuerdos bilaterales de protección de inversión por un solo acuerdo y ya no existirá para las posibles controversias el mecanismo de arbitraje, sino que habrá un tribunal, que es lo que ambas partes querían, un tribunal permanente y muy reducido, claro, porque no hay muchas controversias, afortunadamente, pero es una apuesta por un modelo que nos gustaría que existiera a nivel global.

Y para la inversión, yo creo que ese acuerdo, que ya, como dije, es el primero en América Latina, le va a dar una ventaja comparativa a Chile. Va a ser un país que va a quedar destacado en la relación y eso, sin duda, va a tener efectos muy positivos.

¿Y sobre las áreas en concreto? Bueno, yo decía que todas, pero desde luego que Chile tiene grandes oportunidades en el sector energético. Ya hay mucha inversión europea, miles de millones de euros invertidos en Chile de larga data en el desarrollo de energías renovables y confiamos en, por ejemplo, desarrollar el sector del hidrógeno verde.

Hemos lanzado en julio, con la visita de la presidenta de la Comisión Europea, un fondo para el hidrógeno renovable y ese fondo lo que pretende es atraer inversión privada. Y existiendo el fondo y el acuerdo, se dan todas las circunstancias para que haya una mayor presencia de inversión europea en el sector de renovables.

Se ha destacado el tratamiento que van a tener las pymes en este acuerdo. ¿Me podría explicar más de qué se trata eso?

Ya el acuerdo anterior, el Acuerdo de Asociación, ha permitido que en la canasta exportadora de Chile hacia la Unión Europea, el peso de las pequeñas y medianas empresas haya ido creciendo en los últimos 20 años. Y ahora ya alcanza el 40%. Es decir, el 40% de todo lo que se exporta de Chile a la Unión Europea proviene de pequeñas y medianas empresas, lo cual es una característica que lo distingue de cualquier otra relación comercial, con Estados Unidos, con China, con Mercosur, con otros importantes socios.

Desde el año 2002 hasta ahora, el peso, por ejemplo, del cobre ha ido reduciéndose y ha ido aumentando el peso en la canasta exportadora chilena de otros productos. Y también con cada vez mayor valor agregado. Es otra característica que se ha visto con el acuerdo anterior y que el acuerdo nuevo seguramente va a potenciar todavía más.

Entre las nuevas materias que incluye el Acuerdo Marco Avanzado Chile-Unión Europea también resalta un capítulo de género y comercio que promueve la igualdad de oportunidades y trato entre hombres y mujeres en el ámbito comercial. ¿De qué se trata eso específicamente?

Se trata en específico de evitar cualquier tipo de discriminación en el comercio. Ya que en ambas partes, en la Unión Europea y desde luego también en Chile, hay una política convencida y transversal de lucha contra cualquier tipo de discriminación, hemos creído conveniente incluir todo un capítulo de género y comercio que va encaminado precisamente a asegurar que también en el comercio no haya ningún tipo de discriminación. Y habrá medidas concretas para evitar que se produzca cualquier distorsión en el comercio por ese motivo.

Se va a trabajar en medidas concretas para cerrar las brechas de género en el comercio exterior, fomentando que la exportación de las empresas lideradas por mujeres. El acuerdo también tiene un artículo entero sobre “work-life balance”, por ejemplo, a través de encuentros entre exportadoras y capacitaciones para que puedan aprender a exportar y hacer redes. Asimismo, recolecta datos segregados por sexo que permitirá hacer un diagnóstico preciso de las brechas en género.

¿Qué plazos se manejan para la ratificación del acuerdo tanto en el Parlamento Europeo como en Chile?

El miércoles se firmaron dos textos. Un acuerdo comercial interino o provisional, que entrará en vigor tan pronto sea ratificado por el legislativo chileno y solamente por el Parlamento Europeo, porque incluye solamente competencias exclusivas de la Comisión. Es el aspecto comercial, y gran parte de los aspectos de inversión. Y luego el acuerdo general, que es el acuerdo marco, que entrará en vigor y sustituirá al que entra en vigor provisionalmente, cuando también las partes que no son competencia exclusiva de la Comisión hayan sido aprobadas en Europa por los parlamentos nacionales y en algún caso incluso por algún parlamento subnacional que tiene competencias en materia de tratados. Esto va a tardar más tiempo, no lo podemos obviar. Por eso se ha hecho esto. Se ha hecho esta división en dos acuerdos, para que los beneficios para el comercio, para ambas partes, puedan ser más inmediatos.

Las esperanzas de un acuerdo comercial Mercosur-UE volvieran a disiparse tras la reciente cumbre en Río de Janeiro. ¿Cree que la firma del acuerdo con Chile puede impulsar las negociaciones de ambos bloques?

Es posible. Hemos estado muy cerca de concluir las negociaciones con Mercosur, que como usted sabe llevan ya muchos años. Hay que esperar ahora que se haga efectivo el cambio de políticas en Argentina, pero hay señales que indican que hay ya voluntad de todos los Estados miembros de Mercosur de llegar a ese acuerdo con la Unión Europea, que es el acuerdo probablemente más importante también para Mercosur, porque el mercado de la Unión Europea es de casi 500 millones de ciudadanos, de consumidores, de renta alta. Además, hay aspectos de las economías que son complementarias, los ciclos agrícolas son complementarios. O sea, ahí hay unos puntos de convergencia e interés que nos llevan siempre a ser optimistas respecto del cierre también de un acuerdo con Mercosur.

¿La Unión Europea tiene en carpeta impulsar un acuerdo similar al de Chile con algún otro país de América Latina?

No. Tenemos una negociación en marcha con México y con Mercosur, pero individualmente no hay ninguna negociación con otro país. O sea, que Chile en eso tiene una situación realmente privilegiada, porque está, digamos, en una liga, por usar un símil futbolístico, que está por encima de su población. Es un país con el que hay una relación estratégica y hay un acuerdo específico como le correspondería a México o a Mercosur. Y en este caso solamente lo tiene Chile.