Ciudadanos no siempre fue Ciudadanos. Cuando se creó en 2006, la formación política liderada por Albert Rivera (Barcelona, 1979) se llamaba Ciutadans, en catalán. En 2015, Ciudadanos entró con mucha fuerza en el panorama político español y tras la victoria en las elecciones del 21 de diciembre pasado en Cataluña, las expectativas electorales de la formación cada día son más elevadas.
Según las encuestas, Rivera hoy sería el favorito para gobernar España si se celebraran elecciones generales. Durante su visita a Chile, el líder de Ciudadanos habló con La Tercera sobre su encuentro con el Presidente Sebastián Piñera y el panorama político español.
Ciudadanos nació para "llenar el vacío de representación que existía en el espacio electoral de centro izquierda no nacionalista" en Cataluña. ¿Cómo ha evolucionado Ciudadanos desde entonces?
Ciudadanos nace como una plataforma civil con un manifiesto de intelectuales catalanes en Barcelona con dos ejes principales. Uno, representar a los catalanes que no eran nacionalistas y, por otro lado, por una cuestión de regeneración política. Fuimos el primer partido nuevo después de décadas de bipartidismo PP-PSOE y poco a poco vimos que también, a nivel nacional, había una demanda que quería un nuevo proyecto para España.
Si nos olvidamos por un momento del conflicto territorial con Cataluña, ¿cuáles son los principales retos de España?
Muchísimos. España tiene un problema clarísimo de corrupción y desconfianza en la política. España tiene que recuperar un papel de liderazgo en Europa y también necesitamos un proyecto de país, que nos reconozcamos como diversos y a la vez que unidos. En ese sentido, el golpe a la democracia catalana lo que hace es poner en jaque y evidenciar esta falta de proyecto de país.
¿Como entra Cataluña dentro de este proyecto cuando hay un porcentaje significativo de catalanes que no quiere formar parte de él?
Hay una parte de la sociedad catalana que en estas elecciones dijo "basta" y luego hay una minoría muy grande, un 47% que sigue queriendo la independencia. ¿Qué hay que hacer? Yo creo que un pacto. Respetemos la Constitución, la democracia y a partir de ahí discutamos en qué cedemos. Yo estoy dispuesto, si soy Presidente del gobierno, a dialogar con los que quieran dialogar.
Ciudadanos dice combatir el populismo y la corrupción, una de las lacras en América Latina. ¿Cree que el populismo también es un problema para la región?
El populismo es un problema global. América Latina fue la cuna de muchos movimientos populistas, como vemos con la situación en Venezuela, Bolivia o Ecuador. Yo creo que al igual que se gestó el movimiento bolivariano también hay una respuesta de las clases medias de la región que dicen basta de arruinar el país. Y Ciudadanos tiene la obligación de participar intelectual y políticamente con los aliados que quieran defender esto en Latinoamérica.
¿Qué tipo de relaciones espera tener con el Presidente Piñera?
Me reuní con él en el Palacio de La Moneda, que es un lugar emblemático para cualquier demócrata y lo vi muy convencido de la posición en la que se encuentra. Personalmente, creo que este segundo mandato de Piñera se va a caracterizar por un poco más de calma, de un ritmo distinto, de una coalición más amplia.
A raíz de la sentencia de La Manada, el feminismo ha marcado la agenda en España y también aquí en Chile...
El feminismo es una causa transversal, no de partido. Creo que hay un feminismo liberal, abierto, que no excluye a nadie y no se quiere abanderar. En ese sentido, nosotros vamos a participar de eso sin duda. Sobre el tema de La Manada, conversamos con el Presidente Piñera sobre lo que ocurrió en España. Los legisladores tenemos que hacer más autocrítica en lugar de echarles la culpa a los jueces. He visto a ministros acusando a jueces, pero he visto muy pocos políticos diciendo que quizás no se ha regulado bien el Código Penal. No les podemos pedir a los jueces que no interpreten el Código Penal. Yo me siento en la obligación, como padre que soy de una hija, de legislar y si hace falta cambiarlo, se cambia. Lo que no me ha gustado de ese debate es ver a políticos echándoles la culpa a los jueces como si nosotros no pudiéramos cambiar las leyes.
¿Se ve en un futuro próximo como Presidente de España?
Si te digo la verdad, uno nunca acaba de asumir lo que está pasando. Sí que es cierto que me siento más preparado, voy a reconocerlo, de lo que estaba hace tres años. En este año y medio que queda de legislatura voy a intentar prepararme y tener un buen equipo para gobernar y soy consciente que nadie va a gobernar solo. Pero me gustaría encabezar un gobierno, no apoyarlo.