Los responsables de Defensa de África Occidental han elaborado un plan para una posible intervención militar destinada a revertir el golpe de Estado de la semana pasada en Níger, que incluye cómo y cuándo desplegar fuerzas, dijo el viernes un dirigente del bloque regional.
La Comunidad Económica de los Estados de África Occidental (CEDEAO) no revelará a los golpistas detalles como el tiempo y lugar del ataque. Esa decisión la tomarán los jefes de Estado, declaró Abdel-Fatau Musah, comisario de Asuntos Políticos, Paz y Seguridad del grupo.
“Todos los elementos que intervendrán en una eventual intervención han sido elaborados aquí, incluidos los recursos necesarios, el cómo y el cuándo vamos a desplegar la fuerza”, declaró Musah al término de una reunión de tres días en Abuja, capital de Nigeria.
La CEDEAO ya ha impuesto sanciones a Níger y ha declarado que podría autorizar el uso de la fuerza si los golpistas no devuelven el poder al Presidente electo Mohamed Bazoum antes del domingo.
El organismo de 15 miembros envió el jueves una delegación a Níger en busca de una “solución amistosa”, pero una fuente de la comitiva reveló que una reunión en el aeropuerto con los representantes de la junta no dio ningún resultado.
“Queremos que la diplomacia funcione y que se les transmita claramente el mensaje de que les estamos dando todas las oportunidades para que den marcha atrás en lo que han hecho”, señaló Musah.
El derrocamiento de Bazoum es el séptimo golpe de Estado en África Occidental y Central desde 2020. Dadas sus riquezas en uranio y petróleo y su papel fundamental en una guerra contra los rebeldes islamistas, Níger tiene una importancia estratégica para Estados Unidos, China, Europa y Rusia.
Los donantes occidentales han recortado su apoyo en señal de protesta, pese a que Níger es una de las naciones más pobres del mundo y el 40% de su presupuesto depende de la ayuda. Los países de la región han impuesto sanciones económicas que, según los residentes, están empezando a notarse.
La nueva junta militar, dirigida por el excomandante de la guardia presidencial Abdourahamane Tiani, revocó esta semana los pactos de cooperación militar con Francia, antigua potencia colonial, como hicieron sus vecinos Mali y Burkina Faso tras sus golpes de Estado.
Francia tiene entre 1.000 y 1.500 soldados en Níger, apoyados por drones y aviones de guerra, ayudando a combatir a grupos vinculados a Al Qaeda y Estado Islámico en la región del Sahel. Estados Unidos, Alemania e Italia también tienen tropas estacionadas en Níger.