Líderes mundiales reclamaban el martes acciones más firmes para combatir el cambio climático, mientras crecían las peticiones en la cumbre climática internacional de este año en Egipto de que las empresas de combustibles fósiles ayuden a pagar por el daño que han ayudado a causar al planeta.
El jefe de Naciones Unidas, António Guterres, advirtió el lunes que la humanidad estaba “en una autopista al infierno climático con el pie en el acelerador” e instó a los países a “cooperar o perecer”.
Guterres y jefes de gobierno como la primera ministra de Barbados, Mia Mottley, dijeron que es hora de que las empresas de combustibles fósiles contribuyan a los fondos que proporcionarían ayuda financiera a países vulnerables por las pérdidas que sufren asociadas al clima.
La idea de un impuesto que grave los beneficios caídos del cielo de empresas que contribuyen a las emisiones en los últimos meses, después de que grandes empresas de gas y petróleo reportaran beneficios disparados al tiempo que los consumidores tenían problemas para afrontar el coste de calentar sus hogares y repostar sus autos.
Las negociaciones del martes en Egipto se celebraban a la sombra de las elecciones parlamentarias en Estados Unidos, y muchos activistas medioambientales creían que una derrota demócrata en los comicios de media legislatura podría complicar que el presidente, Joe Biden, cumpla sus ambiciosos objetivos climáticos.