El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), seguirá en el poder hasta 2024, al imponerse la opción que defendía su continuidad en un referendo que se llevó a cabo este domingo y se caracterizó por la baja participación.

Según un conteo rápido del Instituto Nacional Electoral (INE), entre 90,3% y 91,9% de los electores votaron a favor de que el mandatario “siga en la presidencia”, frente al rango de 6,4% a 7,8% que apoyaron revocarle el mandato “por pérdida de la confianza”.

Sin embargo, apenas entre el 17% y 18,2% de los cerca de 93 millones de acreditados para votar habría acudido a las urnas, muy lejos del 40% necesario para que la consulta sea vinculante.

La oposición calificó el referéndum, el primero de su tipo en la historia de México, como un “fracaso” y aseguró que se gastó innecesariamente una gran cantidad de recursos que pudieron disponerse para atender otras urgencias en el país.

Origen del referendo

El actual jefe de Estado, quien anuló su boleta escribiendo “¡Viva Zapata!” -en referencia al líder de la Revolución Mexicana Emiliano Zapata- impulsó la consulta tras conseguir, en 2019, que se incluyera en la Constitución como un antídoto contra lo que llamó “malos gobiernos”.

“La democracia tiene que convertirse en México en un hábito porque eso nos va a ayudar a que nadie, en ningún nivel en la escala, se sienta absoluto. Que nadie olvide que el pueblo es el que manda, el pueblo pone y el pueblo quita, porque el pueblo es el soberano”, dijo AMLO tras emitir su voto.

Desde que el mandatario asumió el poder a fines de 2018, la violencia del crimen organizado no ha dado tregua, la pobreza ha crecido, la inflación ha tocado máximos de dos décadas y la economía ha ralentizado su crecimiento, agravada por la pandemia del coronavirus.

No obstante, la popularidad del gobernante se ha mantenido en alrededor del 60%, según varios sondeos, azuzada por el debilitamiento y división que enfrenta la oposición.