Tres días después de alcanzar un consenso sobre el acuerdo comercial que marcará el divorcio entre la Unión Europea (UE) y Reino Unido, que comenzará a regir desde el 1 de enero, ambas partes acordaron formar una estructura paralela para “vigilar y supervisar” el Brexit.

Según el diario español El País, Bruselas y Londres establecieron la creación de un Consejo de Dirección que contará con la participación de miembros de la Comisión Europea y del gobierno británico de Boris Johnson.

Aunque el acuerdo final de 1.246 páginas no ha sido ratificado y se espera que esta semana sea firmado, las autoridades diseñaron un “esquema de cooperación y coordinación” para facilitar los procesos.

Después de 10 meses de negociación marcados por las consecuencias de la pandemia, la UE y Reino Unido pactaron un órgano que les permita tomar decisiones de forma bilateral, en que ambas partes tienen “el mismo peso” en las materias del acuerdo, como el comercio, el transporte y aduanas.

De esta manera, se conformará un Consejo del Partenariado, que será liderado por un equipo de Bruselas y por funcionarios ministeriales de Londres, que se reunirá al menos una vez al año.

Además, este grupo de trabajo será asistido por 18 comités especializados encargados de verificar “la ejecución del Brexit en sus distintas áreas”.

Incluso, el texto aborda la idea de formar una Asamblea Parlamentaria conjunta, compuesta por miembros del Parlamento Europeo y del británico para trabajar en coordinación.