A unos 60 kilómetros al noroeste de la capital, la autopista A13 quedó bloqueada parcialmente a la altura de Buchelay y, al otro lado de París, se instalaron los primeros tractores a ambos lados de la mediana de la A4 a su paso por Jossigny. También se ha bloqueado la autopista A-10, en el sur, à 50 kilómetros del centro de París.
Los agricultores con sus tractores responden así al llamado del sindicato agropecuario mayoritario, FNSEA, y sus aliados de los Jóvenes Agricultores que habían pedido un “cerco de la capital por una duración ilimitada”.
“No somos bandidos. Solo queremos respuestas, porque este es nuestro último convoy, nuestra última lucha por los agricultores (...) Es una cuestión de supervivencia”, dijo a la agencia de noticias francesa AFP Karine Duc, miembro del sindicato Coordinación Rural.
Las autoridades han movilizado a 15.000 policías y gendarmes para evitar que se bloqueen los aeropuertos parisinos y el mercado de Rungis, a unos siete kilómetros de la capital y que abastece a los comercios de toda la región parisina.
El gobierno de Emmanuel Macron prepara nuevas medidas que serán anunciadas en 48 horas. Este lunes se reúne con tres de sus ministros. De momento, las propuestas que hizo el viernes pasado el primer ministro, Gabriel Attal, no han desactivado la protesta. Se trataba de la supresión del aumento de la tasa del diésel de uso no agrícola o ayudas a sectores en crisis. Los agricultores las consideran insuficientes.
Los agricultores denuncian que ya no pueden vivir de la agricultura por el alto costo de funcionamiento y el encarecimiento de los productos. Además, denuncian demasiadas normas ambientales e impuestos. Asimismo, se oponen al tratado de libre comercio con el Mercosur.
El sector agrícola, que pesa en la economía francesa un 2,1% del PIB, ha recibido el apoyo de otros sectores. Greenpeace desplegó una pancarta en el puente de la Concordia de París, con el lema: “Apoyo a los agricultores. Stop a los acuerdos de libre comercio”.
La protesta ya se ha extendido a otros países de Europa como Alemania, Polonia, Rumania y Bélgica. Los agricultores belgas bloquearon una importante autopista exigiendo cambios en la Política Agraria Común (PAC). En España, los sindicatos agrícolas se están organizando para iniciar una protesta la próxima semana.