Los 84 países y organizaciones firmantes de la Cumbre por la Paz en Ucrania organizada en Lucerna (Suiza) por el presidente del país, Volodimir Zelenski, perciben como “necesaria” la inclusión de Rusia en futuras conversaciones de paz, al tiempo que han instado a la declaración firme de todas las centrales nucleares del país, comenzando por la de Zaporiyia, “bajo completo control soberano de Kiev” y llamado al retorno de “todos los civiles, niños incluidos”, deportados y desplazados “de manera ilegal” a Rusia.
“Creemos que alcanzar la paz necesita de la participación y del diálogo entre todas las partes”, reza la declaración final del encuentro, firmada entre otros por Estados Unidos, Reino Unido, la Comisión Europea, Italia, Portugal o España. “Por lo tanto, hemos decidido adoptar pasos concretos en el futuro para implicar a representantes de todas las partes en los aspectos mencionados en este comunicado final”, añaden.
Los firmantes defienden la Carta de Naciones Unidas y el Derecho Internacional como herramientas marco de “una paz duradera y justa” al conflicto y para solucionar las cuestiones tratadas en la cumbre, comenzando por el “retorno de los niños ucranianos desplazados de manera ilegal y deportados, así como el regreso del resto de civiles detenidos de manera ilegal y la liberación de sus prisioneros de guerra a través de un intercambio completo”.
Los firmantes también instan a que las instalaciones nucleares de Ucrania queden completamente al margen del conflicto y añaden que tanto centrales como otro tipo de instalaciones de este ámbito “operen de manera segura bajo el completo control soberano de Ucrania y bajo su supervisión”.
La declaración final considera también “fundamental la navegación comercial libre, plena y segura, así como el acceso a los puertos marítimos de los mares Negro y Azov” y condena que los ataques a buques mercantes en los puertos y a lo largo de toda la ruta, así como contra puertos civiles e infraestructuras portuarias civiles, son inaceptables.
“La seguridad alimentaria no debe convertirse en un arma de ninguna manera. Los productos agrícolas ucranianos deben entregarse de forma segura y gratuita a terceros países interesados”, añaden.
Ausentes en la firma
Varios países presentes en la Cumbre de Paz en Ucrania no han firmado la declaración final de la reunión; una decisión que ha aceptado el gobierno ucraniano, que ha puntualizado que uno de los objetivos del encuentro era el de dar voz a todo tipo de opiniones.
Según la lista de países firmantes de la declaración final, India, Brasil, Arabia Saudí y México no han estampado su firma en el documento. Entre los no firmantes, por lo tanto, se encuentran varios países del llamado Sur Global, una región que el presidente Zelenski quería ganarse durante la cumbre de Suiza.
En respuesta, el ministro de Exteriores ucraniano, Dimitro Kuleba, ha reiterado que este evento quería impulsar “un diálogo franco” para “alcanzar las decisiones correctas”. “Reunir a todo el mundo para que hablen al unísono sobre Rusia es precisamente la clase de evento que no gusta a Moscú”, ha indicado.
La propia presidenta suiza y anfitriona de la Cumbre, Viola Amhard, reconocía este pasado sábado que no se hacía “ilusiones” sobre un posible “entendimiento final” en la reunión. “Pero es posible que sirva para que nos acerquemos a ese fin”, quiso matizar.
Sobre la inclusión de Rusia como parte necesaria para el diálogo, Kuleba ha declarado que entiende “perfectamente” que llegará un momento en que será necesario dialogar con Moscú, pero siempre en igualdad de condiciones. “Nuestra posición es muy clara: no permitiremos que Rusia hable el lenguaje de los ultimátums, como lo hace ahora”, ha señalado Kuleba en declaraciones a los medios ucranianos.