Este sábado en la madrugada fue encontrado el submarino argentino ARA San Juan en unos 907 metros de profundidad y 500 kilómetros de Comodoro Rivadavia. La paradero de la nave y el destino de los tripulantes fue un misterio para las autoridades y sus familias durante 366 días.
De acuerdo a información de la Armada de Argentina, el sumergible implosionó dos horas después de su última comunicación con el satélite y se cree que ello ocurrió cuando estaba cerca del lecho marino.
La nave fue encontrada en cuatro partes: proa, popa, hélice y el casco resistente - la parte habitable de la submarino - no se partió. Por ahora, queda en duda si el ARA San Juan podrá ser extraído hacia la superficie.
El diario argentino La Nación tuvo acceso de las últimas conversaciones por Whatsapp que sostuvieron algunos miembros de la tripulación. El primero corresponde el cabo principal, Daniel Alejandro Polo, quien residía en Mar del Plata aunque había nacido en San Pedro de Jujuy.
En el dialogo entre el cabo y su madre, Margarita. Ambos se desean muy suerte y se mandan cariños.
El jefe de máquinas, Hernán Rodríguez, conversó por su esposa, Marcela Moyano por última vez el 8 de noviembre del año pasado: "Besitos bebé, te amo chauuu. Que dios te proteja" a lo que ella responde "Te amo mi vida. Gracias por ser mi hombre".
Por ahora los familiares insistieron que continuarán alojando en Mar del Plata, mientras exigen que el submarino sea rescatado.