En un enérgico discurso, el presidente de Brasil, Lula da Silva, condenó la tarde de este domingo la invasión a las sedes del Congreso, de la Corte Suprema y del palacio presidencial de Planalto, por parte de manifestantes bolsonaristas radicales, quienes además se enfrentaron con la Policía Militar, ocasionando graves disturbios en Brasilia.

El mandatario que asumió el pasado domingo 1 de enero manifestó desde el estado de Sao Paulo, donde había viajado para supervisar los estragos causados por las inundaciones, que quienes protagonizaron estos hechos “aprovecharon el silencio del domingo cuando todavía estábamos formando el gobierno para hacer lo que hicieron”, atribuyéndole responsabilidad de lo sucedido al expresidente Jair Bolsonaro, como a los partidos que lo apoyan y a sus adeptos.

A su vez defendió la democracia de ese país, señalando que lo ocurrido nunca se había visto en la historia de Brasil, afirmando que “es un hecho sin precedentes”.

Además, advirtió que llegará hasta el último responsable de lo sucedido, como también irá detrás de quienes financian a estas personas que formaron parte de los disturbios, asegurando que los perseguirá con “todo el peso de la ley”, tildándolos de fascistas y de antidemocráticos.

También recordó que ha habido “varios discursos” de su predecesor, Jair Bolsonaro, en los que “alienta” la toma de los distintos poderes. “Esta también es su responsabilidad y la de los partidos que lo apoyaron”, remarcó.

No obstante a ello, y citando a la Constitución de Brasil, Lula nombró a un interventor y anunció una intervención federal que ya está en marcha para lograr reordenar el país, con el fin de que no se incentive que estos hechos continúen desarrollándose.

Por otra parte, anunció que visitará los tres palacios que fueron asaltados e invadidos, aclarando que esto “no quedará impune”. En ese sentido recordó las veces en que él perdió las elecciones de 1994 y 1998, asegurando que “nunca se me pasó por la cabeza ni a mis partidarios hacer algo como lo que estamos viendo hoy”.

Supporters of Brazil's former President Jair Bolsonaro break into a building during a demonstration against President Luiz Inacio Lula da Silva in Brasilia, Brazil, December 8, 2023. REUTERS/Adriano Machado