El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, que sufrió un traumatismo craneoencefálico el mes pasado, se sometió el domingo en Brasilia a pruebas de imagen, y el parte médico indicó que su estado se mantiene estable.

Lula puede realizar sus actividades habituales y su situación será evaluada de nuevo en una semana, según el informe emitido por el Hospital Sirio-Libanés de Brasilia.

A finales de octubre, Lula se cayó en su casa y sufrió una pequeña hemorragia cerebral y un traumatismo en la parte posterior de la cabeza que requirió puntos de sutura, según informó su médico personal, Roberto Kalil.

El líder brasileño ha estado trabajando desde el Palacio Presidencial, pero canceló sus viajes internacionales, entre ellos al próximo foro de líderes del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico en Lima y a la cumbre de Naciones Unidas COP29 en Azerbaiyán.