La líder opositora venzolana, María Corina Machado, calificó este viernes de desgarrador el asesinato de Edwin Santos, dirigente y cofundador del partido político opositor Voluntad Popular (VP) en el estado Apure, quien había sido detenido el miércoles pasado por agentes del Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin).
“Esto es desgarrador, asesinaron a Edwin. Un joven líder político y voluntario católico, padre de dos niños chiquitos”, escribió Machado en una publicación en X.
La fundadora del movimiento Vente Venezuela aseguró que Santos era un hombre “bueno y alegre que amaba su tierra y se entregó a luchar por su democracia. Todo el mundo lo quería”, según el reporte del diario local ‘El Nacional’.
“Esto ha escalado a otro nivel de violencia y maldad. Un ciudadano es secuestrado por razones políticas, asesinado estando bajo el poder de fuerzas de seguridad y abandonado su cuerpo en la calle”, añadió.
Machado dijo que por el dirigente político se tiene que hacer “cumplir la Constitución, el respeto a los derechos humanos y la soberanía nacional”. “Esto tiene que acabar, ni un muerto ni un preso más”, demandó.
Acusan a organismos de seguridad de asesinar a Santos
Este viernes, el partido Voluntad Popular (VP) denunció, a través de un comunicado, el asesinato de Santos luego de “haber sido secuestrado por miembros de los organismos de seguridad del Estado”, un “hecho confirmado por testigos de la zona” donde se encontraba.
La colectividad aseguró que, hasta la tarde del jueves, Santos se encontraba en “la sede de la DGCIM (Dirección General de Contrainteligencia Militar) en Guasdualito”, una localidad cercana a la frontera con Colombia.
Según el partido, el opositor fue un “actor fundamental en la victoria” en Apure de las presidenciales del 28 de julio, en referencia al triunfo que la oposición venezolana, agrupada en la Plataforma Unitaria Democrática (PUD), insiste que obtuvo su candidato, Edmundo González Urrutia, en esos comicios, pese a que el Consejo Nacional Electoral (CNE) proclamó ganador a Nicolás Maduro.
Su muerte -advirtió VP- es una “señal clara política de retaliación en su contra y en contra del activismo político democrático”.
Santos tenía 36 años de edad y había sido coordinador local del comando de campaña presidencial de la PUD, según el Comité de Derechos Humanos del partido Vente Venezuela (VV), que exigió una investigación “transparente e independiente”.