¿Por qué razones cree que Italia es el país de Europa con más casos de coronavirus?
La razón es que Italia fue infectada primero en Europa. En este sentido, el caso italiano tiene mucho que decir a todos los países que todavía están atrás en la curva de contagio. Según los estudios del profesor Massimo Galli, de la Universidad de Milán, el virus comenzó a circular en el norte de Italia a mediados de enero. Esto no es sorprendente, ya que el norte es la parte más globalizada del país, con relaciones comerciales muy estrechas con Asia. Las autoridades reaccionaron con máximo rigor y total transparencia. Nuestro sistema nacional de salud comenzó a practicar una gran cantidad de pruebas. Se establecieron “áreas rojas” con la obligación de quedarse en la casa. Lo que faltó, al principio, fue la conciencia en la población de la gravedad de la enfermedad y la necesidad de cambiar su comportamiento diario y de enfrentar pérdidas económicas. Luego, a medida que pasaban los días, la curva de contagio mostró su carácter dramáticamente exponencial. Los italianos se dieron cuenta de que su futuro estaba en juego. El gobierno adoptó la medida de mitigación más radical posible.
¿Cuáles son los desafíos que debe asumir el sistema de salud italiano? ¿El país estaba preparado para enfrentar una pandemia?
Los italianos estamos orgullosos de nuestro sistema nacional de salud, que según el índice Bloomberg 2019 es el cuarto más eficiente del mundo y ofrece servicios hospitalarios gratuitos a todos los ciudadanos. En esta pandemia, el sistema enfrenta una prueba de proporción. Solo la solidez del sistema le ha permitido hacer frente al crecimiento exponencial de los casos. Los equipos médicos trabajan incansablemente. Los médicos y enfermeros son nuestros nuevos héroes.
¿Qué errores cree que se cometieron a la hora de hacer frente a la crisis sanitaria?
Nos retrasamos en darnos cuenta, a nivel individual, del riesgo que corríamos. Pero la buena noticia es que la conciencia colectiva por fin ha llegado y se está traduciendo en una forma espectacular de civismo.
¿Cuál considera que serán los costos políticos para el primer ministro Giuseppe Conte tras el “cierre” del país?
En este momento el país experimenta un sentido de unidad como nunca antes y el gobierno tiene un alto nivel de confianza en la población. El hashtag #iorestoacasa (#mequedoenlacasa) se ha convertido en la forma más elevada de altruismo. Quizás no sea arriesgado decir que este es un punto de inflexión en la historia de nuestro país. Los historiadores dicen que el Risorgimento, nuestro movimiento de unidad nacional, fue un fenómeno de élite y los italianos continuaron sintiéndose romanos, milaneses o napolitanos. Hoy impresiona ver un país tan compacto y tan orgulloso frente a la adversidad.
¿Cómo evalúa la suspensión en Chile de los vuelos provenientes de Italia?
Chile no ha suspendido los vuelos, ha impuesto una cuarentena a las personas que llegan de Italia. Me parece una medida comprensible y coherente con las tomadas en Italia.
Ante una actual situación que se asemeja a la de un país “fantasma” dada la orden de cuarentena, ¿cuál cree que será el impacto económico para Italia post coronavirus?
El impacto económico es y será muy fuerte. En esta perspectiva, el gobierno italiano ha puesto en marcha medidas extraordinarias para estimular el crecimiento tan pronto como hayamos ganado esta batalla. Pero Italia está lejos de ser “un país fantasma”, aunque las calles están vacías. En estos días está floreciendo un nuevo orgullo nacional y percibo una voluntad general de arrancar nuevamente con fuerza. La Italia del mañana saldrá fortalecida.