Los bonos argentinos se desplomaron el lunes hasta 12% en la apertura de los mercados en Nueva York mientras el peso se devaluaba luego del sorpresivo triunfo del ultraderechista Javier Milei en las primarias en las que fueron elegidos los postulantes para los comicios presidenciales de octubre.
En tanto, el índice Merval -que agrupa a las acciones líderes que cotizan en la Bolsa de Comercio de Buenos Aires-, caía 2,58% a media mañana.
Milei sacudió el domingo el escenario político argentino al convertirse en el precandidato presidencial más votado luego de aglutinar los votos de los argentinos descontentos con la dirigencia política tradicional que en los últimos años ha sido incapaz de combatir la inflación, la inseguridad y la corrupción.
El Banco Central de Argentina llevó el cambio oficial a 356 pesos por dólar -respecto de los 298 pesos del viernes- y subió la tasa de interés de referencia 21 puntos hasta el 118% anual para evitar que los argentinos se refugien en el dólar para no perder poder adquisitivo.
En tanto, el dólar que cotiza en el marcado paralelo, al que acuden los ahorristas por las limitaciones del gobierno para adquirir divisas, se disparaba a 690 pesos respecto de los 605 del viernes, según algunos operadores consultados por AP.
En las sorpresivas internas que revelaron una inclinación del electorado hacia la derecha, la exministra de Seguridad Patricia Bullrich fue la ganadora de la interna de la coalición opositora Juntos por el Cambio, mientras que el gobernante peronismo se ubicó en tercer lugar con el ministro de Economía, Sergio Massa, como candidato.
Jorge Arias, de la consultora Polilat, vaticinó un escenario económico volátil y sumamente problemático hasta las elecciones del 22 de octubre a partir del triunfo de Milei que propone dolarizar la economía para combatir la crónica inflación en momentos en que el Banco Central sufre una merma de sus reservas de divisas.
“Los mercados van a ser fuertemente especulativos, más aún de lo que ya venían, con un Banco Central y una economía bastante maltrechos, por lo que no hay muchas posibilidades de fuego en un escenario que va a estar dependiente de cualquier rumor y operación con un puñado de dólares, porque esta es la mayor debilidad que tiene hoy la economía”, dijo Arias a The Associated Press.
El analista dijo que Massa -un moderado dentro del peronismo que tiene aceitados lazos con dirigentes de Estados Unidos y es aceptado por los mercados financieros- “tendrá que hacer valer todas las calidades de mago, tanto como candidato como ministro de Economía... para generar acciones que puedan domar la situación”.
Milei también propone cerrar el Banco Central para evitar que siga emitiendo pesos y acelere la inflación -la última medición de junio dio un 115% interanual-, que arrojó al 40% de la población a la pobreza.
Mariano Machado, analista principal para las Américas de la empresa de inteligencia de riesgos Verisk Maplecroft, dijo que Milei aún no ha dado detalles de cómo implementaría sus medidas y apuntó que su plan podría “vincularía la inflación a los tipos estadounidenses”.
“La dolarización de los costos podría acabar con la competitividad de los pocos sectores que siguen impulsando la economía local como el sector agrario, crucial para la obtención de divisas, y los que presentan oportunidades de futuro como la minería, el petróleo y el gas”, acotó Machado.
Indicó además que en el escenario actual de pobreza “un aumento importante del desempleo y/o la informalidad incrementaría el fuego bajo la olla a presión existente” llegando a niveles similares a los de principios de los años noventa.
Milei está a favor de la libre portación de armas y de la venta de órganos y en contra del aborto. Afirma que el cambio climático es una mentira y es admirador de los expresidentes de Brasil y Estados Unidos, Jair Bolsonaro y Donald Trump, respectivamente.
“Me asusta más los que está pasando hoy que los resultados de ayer. Ya se devaluó el peso, eso va a impactar en precios y salarios, otra vez suben la tasa de interés y el dólar ‘blue’ (paralelo) y todos sabemos que es una escalada que no va a parar”, dijo a AP Hernán Cortizo, de 48 años y dueño de un negocio de venta de indumentaria.