"Si estos autos (...) se convierten de repente en una amenaza para la seguridad de Estados Unidos, entonces esto nos parece espantoso. Todo lo que puedo decir es que estaría bien que consigamos llegar a verdaderas negociaciones", afirmó Merkel.
La industria automotora alemana sería la primera afectada por medidas arancelarias por parte de Estados Unidos.
La canciller hizo estas declaraciones durante la Conferencia de Seguridad de Munich, donde el vicepresidente estadounidense Mike Pence también tiene que hablar.
Merkel dijo asimismo que los vehículos fabricados en Baviera, en el sur de Alemania, no representaban una mayor amenaza que los mismos vehículos producidos en Carolina del Sur, en Estados Unidos, donde "se encuentra la mayor fábrica de BMW en el mundo".
El departamento de Comercio estadounidense concluyó que los autos y el material automovilístico importado eran una amenaza para la seguridad nacional de Estados Unidos, ya que debilitaba la industria automotora, indicaron fuentes concordantes a la AFP, lo que podría dar paso a nuevos aranceles.
Los grupos automotores alemanes, entre ellos los gigantes Volkswagen, Daimler (Mercedes Benz) y BMW exportaron en 2018 470.000 autos de Alemania hacia Estados Unidos, según cifras de la federación de constructores VDA.