Milei dice que Trump respalda la reforma de libre mercado de Argentina

El Presidente Javier Milei dijo que el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, ayudará a impulsar su reforma de libre mercado en Argentina, en un momento en que esta gran nación sudamericana, que durante mucho tiempo había mantenido a Estados Unidos a distancia, se reposiciona más cerca de Washington.

En una entrevista, el agitador de 54 años dijo que está apostando a que Trump probablemente defienda la apuesta de Argentina por obtener miles de millones de dólares en nueva financiación del Fondo Monetario Internacional. Milei también señaló que espera que Trump se incline a negociar un acuerdo de libre comercio con Argentina, incluso si el presidente entrante promete imponer aranceles a China, Canadá y México.

“Creo que es muy probable, porque Estados Unidos descubrió que somos un socio confiable”, dijo Milei al Wall Street Journal el martes, en el ornamentado palacio presidencial Casa Rosada.

“Somos un aliado estratégico”, agregó Milei, quien se reunió con Trump en su casa de Mar-a-Lago en noviembre y planea asistir a la inauguración, el 20 de enero.

Aunque Trump afirmó recientemente que Milei era “una persona MAGA (Make America Great Again)”, el expresidente tiene planes proteccionistas para Estados Unidos y no ha ofrecido públicamente su apoyo a un acuerdo comercial. Una portavoz de Trump dijo que el presidente entrante y Milei trabajarán juntos para beneficiar mutuamente a Estados Unidos y Argentina a través del capitalismo y el libre comercio.

Milei, un anarcocapitalista autodeclarado con patillas al estilo de Wolverine, viene de un sólido primer año en el cargo después de implementar dolorosos recortes de gastos para reducir la tasa de inflación más alta del mundo.

Los resultados sorprendieron a los economistas, incluido el propio presidente argentino, un exprofesor de economía que durante la campaña blandió una motosierra para simbolizar cómo recortaría el gasto gubernamental y las regulaciones.

“La inflación ha caído mucho más rápido de lo que esperábamos”, dijo Milei en su oficina, donde tenía una réplica de una motosierra sobre una mesa larga. “Todo indica que el año que viene vamos a tener menos inflación, mayor PIB per cápita, salarios más altos y menos pobreza”.

Esa es una buena noticia para los 47 millones de habitantes de este país, que se vieron afectados por años de turbulencias económicas que provocaron una reacción contra el establishment político e impulsaron al outsider Milei al poder con promesas de destruir la burocracia estatal.

Los trabajadores perdieron un tercio de su poder adquisitivo durante la anterior administración peronista de izquierda, que llevó la inflación a los tres dígitos, al aumentar la impresión de dinero para cubrir el déficit. El país ha estado esencialmente excluido de los mercados internacionales desde 2018, cuando recibió un rescate de más de 40 mil millones de dólares del FMI, el más grande en la historia del prestamista.

Milei busca un nuevo programa del FMI que le permita a su gobierno levantar los controles cambiarios que heredó y que estrangulan a las empresas. Si bien los economistas dicen que levantar los controles es crucial para atraer las inversiones necesarias para impulsar el crecimiento y crear empleos, también podría debilitar el peso y hacer que la inflación vuelva a subir.

“Nuestra idea es eliminar (los controles) en 2025″, dijo Milei.

Milei rescató al país del borde de la hiperinflación y el colapso económico al implementar una terapia de choque que, según había advertido, sería perjudicial antes de que las cosas mejoraran.

Ahora, las ventas minoristas y los salarios se están recuperando. Las hipotecas están disponibles por primera vez en años. Las exportaciones están aumentando. Los mercados de acciones y bonos están en auge. El riesgo país de Argentina está cayendo.

Su gobierno recortó el gasto público real en un 30% al detener las obras públicas, reducir los subsidios a los servicios públicos que recibían casi todos los argentinos, reducir la transferencia de fondos a las provincias y aumentar las pensiones y los salarios estatales por debajo de la inflación, que actualmente es del 166% anual. Despidió a 33.000 empleados públicos y cerró ministerios y agencias estatales.

La inflación mensual alcanzó el 2,4% en noviembre, desde casi el 26% durante el primer mes de Milei en el cargo, en diciembre de 2023, cuando devaluó el peso en un 50% y levantó los controles de precios de los alimentos.

Desde entonces, el Banco Central ha devaluado el peso a un 2% mensual, una tasa que podría disminuir al 1% si la inflación se mantiene bajo control, dijo Milei.

Argentina ha registrado un superávit fiscal poco común durante los primeros 11 meses de este año después de décadas de gasto excesivo. Algunos analistas políticos se preguntan si el gobierno será capaz de mantener su disciplina fiscal antes de las elecciones legislativas de mitad de período en octubre, cuando en el pasado los políticos han tendido a aumentar el gasto para ganar el apoyo de los votantes.

Pero Milei dice que un presupuesto equilibrado es innegociable, ya que pretende seguir recortando el gasto público, lo que le permitirá reducir los impuestos.

“La regla es que no habrá más déficit en Argentina”, dijo Milei, quien vetó un proyecto de ley en septiembre presentado por legisladores de la oposición para aumentar el gasto en pensiones.

La mejora de las perspectivas económicas y la confianza de los inversionistas en Argentina aumentan la posibilidad de que el país pueda volver a los mercados internacionales. Milei aseguró que las necesidades financieras del próximo año se han cubierto, pero el nuevo panorama facilitará en el futuro la renovación de la deuda.

“Estamos haciendo todo lo posible para volver en 2026″, dijo sobre la posibilidad de recurrir a los mercados globales para obtener préstamos.

Después de una fuerte contracción, la economía creció un 3,9%, ajustado estacionalmente en el tercer trimestre respecto de los tres meses anteriores, reveló el lunes la agencia de estadísticas.

La pobreza sigue siendo dolorosamente alta, pero se ha reducido a poco menos del 50%, según la Universidad Católica de Argentina. Según las encuestas, Milei cuenta con un 55% de apoyo, lo que desafía las expectativas de que su terapia de choque desencadenara un violento malestar social.

El éxito inicial ha convertido al presidente, conocido como El Loco, en una estrella de la derecha global en ascenso, recibiendo elogios de Trump y Elon Musk, a quien Milei comparó con un Thomas Edison o Leonardo da Vinci de la era moderna.

“Es una persona extraordinaria”, dijo Milei, que se reunió con Musk en abril en su fábrica de Tesla en Texas y nuevamente el mes pasado en Mar-a-Lago después de la victoria electoral de Trump.

Cuando se le preguntó si Musk planea invertir en Argentina, que tiene algunos de los depósitos más grandes del mundo de litio necesario para impulsar vehículos eléctricos, Milei señaló que no lo sabe.

“No me corresponde decirle al hombre más rico del mundo dónde debería invertir”, dijo Milei.

Milei está profundizando los lazos con Estados Unidos, pero se ha retractado de sus planes anteriores de romper los lazos con China.

Ahora espera visitar China y reunirse con el Presidente Xi Jinping, aunque dijo que no está claro cuándo podría realizarse un viaje inicialmente planeado para principios del próximo año.

El hombre que una vez describió a los líderes de China como “asesinos”, ahora habla efusivamente de las posibilidades y describe las relaciones con Beijing como “excelentes”.

“Es un socio comercial que no exige ninguna condición”, aseguró. “Es realmente un gran socio comercial”.

Cuando se le preguntó si buscaría un acuerdo de libre comercio con China, un importante comprador de las exportaciones agrícolas de Argentina, Milei manifestó que está abierto a acuerdos comerciales con casi cualquier país.

“Todos los acuerdos de libre comercio que podamos hacer, los vamos a hacer”, dijo. “Los demás pueden hacer lo que quieran, yo voy a seguir buscando el libre comercio”.

Milei dice que su ascenso a la presidencia no ha cambiado su odio por el Estado. Como comentarista de televisión antes de ser elegido, Milei describió los impuestos como un robo y a una élite política corrupta como la “casta”.

“El Estado es el enemigo, sigo siendo anarcocapitalista”, dijo. “Sigo creyendo que el Estado es una organización criminal que se financia a través de una fuente coercitiva llamada impuestos que nadie paga voluntariamente”.

Milei apuesta a que las mejoras económicas aumentarán el apoyo de su partido en el Congreso en las elecciones de octubre. Eso facilitará la aprobación de reformas para hacer de Argentina “el país más libre del mundo”, dijo. Su partido Libertad Avanza tiene alrededor del 15% de los escaños en la Cámara de Diputados y menos del 10% en el Senado.

“No tengan ninguna duda”, afirmó, “no voy a parar”.