El expresidente de Bolivia y líder del oficialismo, Evo Morales, se refirió este domingo al intento de golpe de Estado que ocurrió el pasado miércoles al mando del ya destituido jefe militar Juan José Zúñiga contra el gobierno de Luis Arce.
El exmandatario responsabilizó al actual jefe de Estado por el alzamiento militar, expresando que “engañó” y “mintió” al pueblo boliviano y al mundo. Fue a través de su cuenta en X, que apuntó contra Arce y catalogó como “lamentable que se use un tema tan sensible como la denuncia de un golpe”.
Dentro de esto mismo, Morales se disculpó con la comunidad internacional por la “alarma generada” y, también, agradeció por la “solidaridad” a Bolivia. Asimismo, señaló que “es importante que una investigación completa e independiente demuestre la verdad de este hecho”.
El líder oficialista del Movimiento al Socialismo (MAS) había expresado con anterioridad en la radio Kawsachún Coca que se encontraba “confundido” ante la situación porque a su parecer fue un “autogolpe” y que el plan original era impedir su reelección.
“El plan era autogolpe, ‘Lucho’ tenía que entregar la presidencia a la junta militar e irse y detener a Evo Morales”, detalló en el programa dominical. Asimismo, explicó que esto era un plan para “victimizarse con lágrimas de cocodrilo” y darse prestigio.
En esta línea, el general Juan José Zúñiga, quien junto a unidades del Ejército se tomó el pasado miércoles la plaza de Murillo de La Paz, centro del poder político del país, tras ser detenido declaró que el mandatario boliviano, Luis Arce, le había pedido sacar “los blindados” para “levantar” su popularidad, tras confesarle que la “situación está muy jodida”.
“El presidente me dijo la situación está muy jodida, muy crítica. Es necesario preparar algo para levantar mi popularidad. ¿Sacamos los blindados?”, manifestó el militar, quien respondió de forma afirmativa a la supuesta pregunta del presidente.
Por su parte, la Fiscalía General de Bolivia anunció en un comunicado de la apertura de una investigación tanto contra Zúñiga como contra todos los militares partícipes del intento. Reiteraron su compromiso con la defensa de la “legalidad” y de “los intereses generales de la sociedad” para preservar el sistema democrático.
Los antecedentes del alzamiento militar
Este domingo el ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, entregó más detalles sobre el alzamiento militar que vivió Bolivia el pasado miércoles 26 de junio. Castillo informó que el general Juan José Zúñiga ordenó a los militares que disparen contra la gente, pero un comandante en ejercicio se insubordinó.
“Zúñiga dio la instrucción de disparar a la gente que se encontraba en inmediaciones del Palacio Quemado y la Casa Grande. El comandante de la octava división, de acuerdo a algunos hallazgos, le dice que no iba a acatar esa orden y Zúñiga lo amenaza con replegarlo del cargo”, explicó la autoridad.
Añadió que el militar le relató que le respondió a Zúñiga que no dispararían contra el pueblo, y que ya todo lo hecho estaba “mal” y contra la Constitución.
Castillo entregó más detalles, donde aclaró que este intento de golpe de Estado estaría planeado desde mayo y que habrían instruido al personal militar movilizado para transitar con tanquetas de asalto en zonas urbanas.
Según la información entregada por el gobierno boliviano, Zúñiga junto a los generales Juan Arnés (Armada) y Juan Marcelo Zegarra (Fuerza Aérea), procesados como autores del alzamiento militar, no actuaron solos. Y que el ideólogo fue el sociólogo Aníbal Aguilar, con el apoyo de otras personas que presuntamente participaron en el golpe de 2019.
Los generales aprehendidos quedaron en prisión preventiva por orden de la justicia de Bolivia. Si bien Arnés, Zegarra y Zúñiga iban a ser trasladados hasta Chonchocoro, este último fue transferido hasta al penal de El Abra, en Cochabamba por motivos de seguridad y porque los otros privados de libertad en ese recinto no lo querían allí.