El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha destacado que el ataque contra la cúpula de Hezbolá ha propiciado un “nuevo equilibrio de poder” en la región que podría permitir la construcción de “nuevas alianzas”.
“El cambio del equilibrio de poder genera la posibilidad de crear nuevas alianzas en nuestra región, porque Israel está ganando. Nuestros enemigos y amigos vuelven a ver a Israel como lo que es, un país fuerte, decidido y poderoso”, ha declarado Netanyahu en rueda de prensa recogida por ‘The Times of Israel’.
Sin embargo, ha advertido de que “aún hay por delante días difíciles” porque “incluso ahora no debemos olvidar que seguimos estando en medio de una guerra difícil, con costes altos, y por eso es necesaria la cohesión en nuestras filas como condición necesaria”.
La rueda de prensa de Netanyahu ha sido convocada para anunciar la reincorporación del partido Nueva Esperanza al Gobierno de coalición y que el líder de la formación, Gideon Saar, será ministro sin cartera. Esta incorporación “suma a la unidad interna, una unidad contra nuestros enemigos”, según Netanyahu.
“No es ningún secreto que hemos tenido desencuentros en el pasado, pero desde el 7 de octubre hemos dejado atrás todos los rencores”, ha resaltado el primer ministro.
Saar, por su parte, ha argumentado que es “la decisión más patriótica”. “Es importante reforzar a Israel, su gobierno y su unidad y cohesión. Por eso he aceptado la petición del primer ministro Netanyahu para unirme al gobienro y contribuir con mi experiencia y capacidad a su trabajo de toma de decisiones”, ha explicado.
Saar reveló la semana pasada que Netanyahu le ofreció el puesto de ministro de Defensa, ahora en manos de Yoav Gallant, del partido de Netanyahu, el Likud, quien ha manifestado sus discrepancias con el primer ministro en reiteradas ocasiones.
Con la incorporación de Saar, la coalición de Netanyahu eleva a 68 los apoyos en la Knesset o Parlamento israelí, una cámara formada por 120 asientos.