El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, ordenó el cierre de la embajada del Vaticano en Managua y de la embajada de su país ante el Vaticano en Roma, dijo el domingo una alta fuente del Vaticano.
La medida adoptada por Nicaragua tiene lugar unos días después de que el Papa Francisco -durante una entrevista antes del décimo aniversario de su elección el lunes- comparara al gobierno de Nicaragua con una dictadura.
La fuente dijo que si bien los cierres de las sedes diplomáticas no significan automáticamente una ruptura total de las relaciones entre Managua y la Santa Sede, son pasos serios hacia esa posibilidad.