Una niña de siete años ha muerto ahogada esta madrugada al naufragar una embarcación con 16 migrantes a bordo en un canal de la localidad francesa de Watten, en el norte del país.
Según un comunicado de la división policial de la Prefectura Norte, recogido por el portal FlandrePresse, la embarcación, presuntamente robada a vecinos de la localidad, se hundió en torno las 05.00 de este domingo y además hay otras cinco personas desaparecidas.
El canal de Watten conecta con el mar del Norte, cerca de Dunquerque, en una ruta empleada habitualmente por los migrantes que intentan cruzar el canal de la Mancha con destino final a Reino Unido.
Esta ruta es excepcionalmente peligrosa por la baja temperatura de las aguas y las marejadas constantes.
Según las autoridades locales al FlandrePresse, esta no es la primera vez que ocurre una tragedia de este tipo en esta zona dado que la estrecha vigilancia de la costa está provocando que los contrabandistas se alejen de ella en busca de nuevos puntos de embarque.
Watten, relativamente lejos de las playas, es ahora un candidato ideal para el comienzo del viaje de los migrantes.