Donald Trump mantuvo su relación con Vladimir Putin después de dejar la Casa Blanca en 2021, según el nuevo libro de Bob Woodward. El veterano periodista afirma en “War”, que se publicará la semana que viene, que el expresidente estadounidense mantuvo “hasta siete” llamadas telefónicas secretas con el mandatario ruso desde que dejó el cargo.
Durante las primeras etapas de la pandemia de Covid-19 en 2020, mientras todavía estaba en el cargo, Trump envió en secreto “a Putin un montón de máquinas de prueba de Covid de Abbott Point of Care para su uso personal”. Woodward afirmó que, en ese momento, el presidente ruso le dijo al expresidente: “Por favor, no le digas a nadie que me enviaste esto”. A esto, Trump respondió: “No me importa. De acuerdo”, según extractos publicados por CNN y The Washington Post el martes.
“No, no”, argumentó Putin, y agregó: “No quiero que se lo digas a nadie porque la gente se enojará contigo, no conmigo. No les importo”.
Woodward también escribió que la directora de Inteligencia Nacional de Joe Biden, Avril Haines, “eludió cuidadosamente” cuando se le preguntó si hubo alguna llamada telefónica entre Trump y Putin después de que el primero dejó el cargo.
“No pretendo estar al tanto de todos los contactos con Putin. No pretendo hablar de lo que el presidente Trump puede o no haber hecho”, dijo Haines, según Woodward.
El libro detalla que Trump puede haber tenido “hasta siete” llamadas telefónicas con Putin desde que dejó el cargo en 2021, citando a un asistente del expresidente republicano.
Aunque el libro cita numerosas fuentes, el director de comunicaciones de Trump, Steven Cheung, dijo que “ninguna de estas historias inventadas por Bob Woodward es cierta”. “Ninguna de estas historias inventadas por Bob Woodward es verdadera y son obra de un hombre verdaderamente demente y trastornado que sufre un caso debilitante del síndrome de trastorno por Trump”, afirmó Cheung. “Woodward es un hombre pequeño y enojado y está claramente molesto porque el presidente Trump lo demandó con éxito debido a la publicación no autorizada de grabaciones que hizo anteriormente”.
“El presidente Trump no le dio absolutamente ningún acceso a este libro basura que pertenece al contenedor de ofertas de la sección de ficción de una librería de descuento o que se usa como papel higiénico”, agregó Cheung.
Mientras tanto, Dmitri Peskov, portavoz de Putin, también desmintió las afirmaciones, diciendo: “Esto no es cierto. Es una típica historia falsa en el contexto de la campaña política preelectoral”, según el New York Times.
En otra parte del libro, Woodward señala que Joe Biden cree que Barack Obama, el hombre bajo cuya presidencia fue vicepresidente entre 2009 y 2017, “nunca tomó en serio a Putin”, un punto de vista que se refleja en los informes sobre las tensiones entre ambos políticos demócratas.
“La embarraron en 2014″, cuando Rusia invadió Crimea, le dijo Biden a un amigo, según Woodward. “Por eso estamos aquí. La embarramos. Barack nunca se tomó en serio a Putin. No hicimos nada. ¡Le dimos a Putin una licencia para continuar! ¡Bueno, le voy a revocar su maldita licencia!”, habría comentado Biden, consigna The Guardian.
Según CNN, Woodward informa que, en octubre de 2021, la inteligencia estadounidense, que incluía material de una valiosa fuente humana dentro del Kremlin, demostró “de manera concluyente” que Putin planeaba invadir Ucrania. Biden supuestamente le dijo a Bill Burns, el director de la CIA: “¡Jesucristo! ¿Ahora tengo que lidiar con que Rusia se trague a Ucrania?”.
Biden, asegura Woodward, se enfrentó a Putin dos veces ese diciembre, en una videoconferencia y luego en una “llamada acalorada de 50 minutos” en la que Putin “planteó el riesgo de una guerra nuclear de manera amenazante” y Biden le dijo que “es imposible ganar” un conflicto así.