La oficina de Derechos Humanos de Naciones Unidas de Colombia se refirió pidió al gobierno colombiano y a los disidentes de los grupos armados a "incrementar sus esfuerzos" para que el proceso de paz continúe a pesar de la declaración emitida por Iván Márquez, uno de los exlíderes de las Farc sobre el inicio de "una nueva etapa armada". 

El organismo indicó que con la implementación del "Acuerdo de Paz, el Estado tiene la oportunidad de impulsar cambios positivos y sostenibles en acceso y goce de Derechos Humanos" y reiteraron que una vez iniciado el proceso "no se puede dar vuelta atrás".

En ese sentido, recordaron el informe a la Alta Comisionada para los DD.HH. de la ONU, Michelle Bachelet sobre la situación en el país latinoamericano, destacando el punto tres de dicho documento que señala: "EL ACNUDH pide a las partes que incrementen sus esfuerzos para avanzar en la ejecución de todos los capítulos contenidos en el Acuerdo puesto que no puede haber vuelta atrás. Se debe seguir construyendo confianza entre las partes y dentro de la sociedad colombiana, en especial con las víctimas".

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Por otro lado, la Misión de Verificación de la ONU en Colombia emitió un comunicado donde rechaza y condena enfáticamente el anuncio "del rearme de un reducido grupo de excombatientes de las Farc-EP el día de hoy".

La instancia además destacó "el firme compromiso" de las personas que continúan siendo parte del "proceso de reincorporación que sigue cumpliendo el Acuerdo" e hizo un llamado a que continúen  con su voluntad de seguir el acuerdo de paz.

Este jueves, el número dos de las Farc reapareció en un video junto a otros guerrilleros anunciaron que no continuarán siendo parte del proceso de paz iniciado por el gobierno colombiano y en su lugar dieron inicio a "una nueva etapa armada".

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