El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, tildó de “abominable” el ataque terrorista perpetrado este viernes por un hombre armado palestino contra una sinagoga en Jerusalén Este y que dejó un saldo de siete personas muertas.
“Es particularmente abominable que el ataque haya ocurrido en un lugar de culto y el mismo día que conmemoramos el Día Internacional de Conmemoración del Holocausto. Nunca hay excusa para los actos de terrorismo. Deben ser claramente condenados y rechazados por todos”, expresó en un comunicado la oficina de comunicaciones del secretario.
En este sentido, expresó “sus más sentidas condolencias” a las familias de las víctimas a la par que ha dicho estar “profundamente preocupado” por la escalada de violencia en la región. “Este es el momento de ejercer la máxima moderación”, agregó.
El ataque armado ocurrió en los alrededores de una sinagoga en Neve Yaakov, en Jerusalén Este. El hombre palestino disparó desde un automóvil a un edificio utilizado como templo judío, matando al menos a siete personas e hiriendo a algunas más.
Tras ello, el sospechoso, residente en Jerusalén Este, se dio a la fuga hacia el barrio palestino de Beit Hanina, donde fue neutralizado por agentes de la Policía israelí mientras intentaba huir a pie del lugar.