La Organización Mundial de la Salud anunció el jueves que ha concedido la autorización para el uso de emergencia de la vacuna contra el COVID-19 fabricada por CanSino Biologics de China, la undécima de este tipo en recibir el visto bueno.

La agencia de salud de las Naciones Unidas dijo que se halló que la vacuna CanSino de una sola dosis tenía una efectividad de aproximadamente el 92% contra el Covid-19 grave y de 64% en prevenir que la gente desarrolle síntomas de la enfermedad. El grupo de expertos en vacunación de la OMS recomendó aplicarla a todas las personas de 18 años en adelante.

La vacuna de CanSino utiliza un virus inocuo llamado adenovirus para introducir al cuerpo la proteína de espiga del coronavirus, que entonces desarrolla una respuesta inmunológica. La tecnología es similar a las vacunas fabricadas por Johnson & Johnson y AstraZeneca, que utilizan adenovirus distintos.

El año pasado, el más alto funcionario chino para enfermedades infecciosas reconoció que las vacunas desarrolladas en el país ofrecían baja protección contra el Covid-19 y que podría ser necesario mezclarlas con dosis de refuerzo de las vacunas más novedosas que operan con ARN mensajero.

En medio del surgimiento de variantes del coronavirus como delta, ómicron y sus subvariantes, las vacunas de ARN mensajero aparentemente han sido más eficaces en comparación con las de manufactura más tradicional.

El hecho de que la OMS haya autorizado la CanSino significa que la iniciativa COVAX respaldada por la ONU para distribuir vacunas a países pobres ahora puede adquirir y entregar vacunas fabricadas por la compañía china. El año pasado, COVAX firmó un acuerdo para comprar más de 500 millones de vacunas chinas producidas por Sinopharm y Sinovac.

Se desconoce cuántas de esas dosis estan siendo utilizadas. Muchos países que se apoyan en el COVAX para sus programas de inmunización han expresado una preferencia por las vacunas de ARN mensajero fabricadas por Moderna y Pfizer.