Como presidente “legítimo y democráticamente elegido” de Venezuela, reconoció el Parlamento Europeo al excandidato opositor, Edmundo Gonzalez Urrutia, y lo hizo, eso sí, con el voto en contra de los socialdemócratas -grupo al que pertenece el PSOE- y la no participación de los liberales.
La resolución conjunta propuesta por el Partido Popular Europeo, Conservadores y Reformistas que lidera la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, y Patriotas, el grupo del primer ministro húngaro, Viktor Orbán, y la líder de Agrupación Nacional, Marine Le Pen, en el que se encuadra Vox, fue aprobada con 309 votos a favor, 201 en contra y 12 abstenciones.
La iniciativa consiguió además el respaldo de otros grupos de derecha y extrema derecha, incluyendo a Vox y Se Acabó la Fiesta. Entre los representantes españoles, los eurodiputados de PSOE, Sumar, Podemos, ERC, BNG y Bildu votaron en contra en una votación en la que participaron 522 eurodiputados de los 720 de la Eurocámara.
Debido a una enmienda de los socialdemócratas, liberales y verdes, se trata de un texto no vinculante que no exige a la Unión Europea y a sus 27 Estados miembros -encargados de la política exterior- que también validen al excandidato opositor como mandatario.
Los parlamentarios también avalan a María Corina Machado como la líder legítima de la oposición venezolana. Para esta aprobación, en la derecha de la Eurocámara se unió a la extrema derecha.
Las bancadas de izquierda expresan que desean actuar con cautela y que este reconocimiento podría ser apresurado, hasta que se conozcan las actas electorales.
Tras la votación, el eurodiputado socialista Javi López lamentó que el PPE haya decidido apoyarse en Meloni, Orban y Le Pen, “y con el apoyo de la extrema derecha alemana” para aprobar la resolución, “en lugar de hacerlo con los partidos europeístas”, mientras que Oihane Agirregoitia, del Partido Nacionalista Vasco (PNV), ha criticado la falta de diálogo entre los grupos de la Eurocámara para redactar una propuesta de consenso que estuviera “alejada de la extrema derecha y de los partidismos”, según citó Europa Press.
La portavoz del PP, Dolors Montserrat, indicó en redes sociales que el reconocimiento de Edmundo González se trata de una “victoria importantísima” para los demócratas en defensa “de la libertad frente a las dictaduras”. Según Europa Press, fuentes parlamentarias del PP denuncian que los socialistas españoles “se ponen del lado del dictador Maduro” y señalan el voto “sonrojante” ante la resolución en la Eurocámara.
La iniciativa pide a la UE y sus Estados miembros que “hagan todo lo posible” para garantizar que el candidato opositor pueda asumir sus funciones el 10 de enero de 2025, cuando está previsto el cambio de poder en Venezuela.
González Urrutia, actualmente refugiado en España a donde llegó tras una orden de arresto en su contra emitida por las autoridades venezolanas, publicó un video en sus redes sociales, con el que agradeció el pronunciamiento de los eurodiputados. “Como presidente electo, agradezco al Parlamento Europeo por este reconocimiento que me trasciende; es el reconocimiento a la voluntad soberana del pueblo de Venezuela y a la estruendosa voz de una mayoría que exige se respete la verdad”, indicó.
En una entrevista con el diario El País, la líder opositora María Corina Machado indicó que González no se quería ir del país. “Todo el mundo sabe que los hermanos Rodríguez (Delcy y Jorge, principales operadores políticos del presidente de Venezuela) estuvieron en la negociación. El régimen quería que se fuera, lo obligaron; él no quería irse”.
Por otro lado, sigue siendo incierto si el Ejecutivo de España reconocerá o no a González como jefe de Estado venezolano, ya que el presidente del gobierno, Pedro Sánchez, se ha abstenido a hacerlo y ha señalado que lo haría en concordancia con lo que se decida en el seno de la UE, pese a que el Legislativo de su país reconoció recientemente al opositor venezolano, en una resolución impulsada por la oposición, que ha suscitado tensiones diplomáticas entre los dos países.
El gobierno le exigió al Partido Popular que “no ensucie la imagen de España”. Esto luego de la acusación del partido de Alberto Núñez Feijóo de que el Ejecutivo participó en el “golpe de Estado de Venezuela” tras hacerse público que el líder opositor Edmundo González firmó en la Embajada española un documento en el que acataba la victoria de Nicolás Maduro en las elecciones venezolanas. “España no tiene nada que ver con ningún tipo de documento que haya firmado Edmundo González”, dijo el ministro de Exteriores, José Manuel Albares.
Fuentes del gobierno dijeron al diario El País que desde Exteriores se han puesto en contacto con González para pedirle que explique este episodio públicamente y este les ha trasladado que está “muy apesadumbrado” por la polémica, que es un “disparate” la acusación y les ha asegurado que lo aclarará. Fuentes oficiales de Exteriores dijeron al periódico que este ministerio “reitera que Edmundo González pudo reunirse con quien decidió para gestionar su situación mientras estuvo, a petición propia, en la residencia del embajador de España en Caracas”.
Las explicaciones de Albares se conocieron después de la exigencia desde Italia del líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, de que el Ejecutivo español reemplace al embajador español en Caracas, que dimita el ministro de Exteriores, y además que el presidente del gobierno dé explicaciones inmediatas “para demostrar que no es equidistante” entre la democracia y la dictadura. “Si elige la dictadura y no la democracia, me va a tener enfrente siempre”.
González negó que el Gobierno español haya sido coaccionado o haya ejercido alguna presión para que abandone Venezuela, como sostiene el PP. “No he sido coaccionado por el Gobierno de España ni por el embajador español en Venezuela, Ramón Santos. Las gestiones diplomáticas realizadas tuvieron como único propósito facilitar mi salida del país, sin ejercer ningún tipo de presión sobre mí”.