El portavoz de Asuntos Exteriores del Partido Laborista británico, David Lammy, ha pedido este domingo suspender la venta a Israel de armamento que pueda ser utilizado en la invasión de la región de Rafah, en el extremo sur de la Franja de Gaza, donde hay más de 1,2 millones de desplazados, en lo que supone un cambio de postura de la formación.
“El Partido Laborista lleva meses manifestando su oposición a una ofensiva israelí en Rafah y ha dejado claro que no debe pasar”, ha declarado Lammy, según recoge el diario ‘Daily Telegraph’.
“Estaba en la moción aprobada en la Cámara de los Comunes en febrero y es uno de los motivos por los que pedimos a (el ministro de Asuntos Exteriores) David Cameron que publique el resumen de la opinión legal sobre la venta de armas”, ha apuntado.
“El presidente (Joe) Biden tiene razón al decirle al primer ministro (Benjamin) Netanyahu que Estados Unidos no suministrará armamento que pueda ser usado en una ofensiva en Rafah si Israel sigue adelante con un ataque a gran escala sobre Rafá en contra de las advertencias de la comunidad internacional”, ha continuado.
Lammy ha recordado además “Estados Unidos ha sido meridianamente claro en que seguirá suministrando armas que permitan a Israel defenderse por sí mismo”. “El Gobierno de Reino Unido debería trabajar con Estados Unidos para intentar evitar una ofensiva de Rafah diciendo claramente que evaluará las exportaciones de Reino Unido y que si la ofensiva de Rafah se produce, sumarnos a nuestros aliados americanos y suspender las armas y componentes que se puedan utilizar en la ofensiva de Rafah”, ha argumentado.
Reino Unido proporciona un porcentaje mínimo del armamento israelí, pero el gesto tiene relevancia política sobre todo ante las encuestas que pronostican una clara victoria del Partido Laborista en las próximas elecciones británicas.