El pase sanitario europeo inició este lunes un fase de pruebas y debería ser técnicamente operativo en el mes de junio, para permitir viajes dentro de la UE, anunció la Comisión Europea.
Francia y Malta son los dos primeros países en probar la interoperabilidad del sistema este lunes. El objetivo es comprobar la capacidad de los Estados miembros para conectarse al sistema integrado europeo montado para este proyecto.
La fase piloto de dos semanas involucrará a un total de 18 países de la UE más Islandia, dijo un portavoz del ejecutivo de la UE, Johannes Bahrke.
Esta fase, sin embargo, no implica el uso de datos reales ni la participación de los ciudadanos, pero a partir del 1 de junio, los países miembros podrán comenzar a usar el sistema en condiciones reales si están listos, dijo el portavoz.
El certificado sanitario europeo pretende proporcionar un marco armonizado para facilitar la libre circulación dentro de la UE en el verano boreal.
El pase certifica que el titular ha sido plenamente vacunado, que ha arrojado resultado negativo en exámenes o que tiene inmunidad después de haber sido infectado con covid-19.
Este documento irá acompañado de una firma electrónica que atestigua su autenticidad, y la intención de la UE es que los certificados autenticados en cada país sean reconocidos automáticamente en todo el bloque.
Mientras tanto, la normativa legal sobre el certificado o pase sanitario aún es objeto de debates entre eurodiputados y funcionarios del Consejo Europeo, institución que representa a los Estados miembros.
Estas discusiones se centran en la autonomía de cada país para adoptar restricciones adicionales, como una cuarentena, o los costos para los ciudadanos.
Un nuevo período de sesiones de negociación está previsto para el martes. Seguidamente, el Consejo tendrá que aprobar un eventual proyecto de compromiso y someterlo a voto en el plenario del Parlamento Europeo.