El expresidente de Perú, Pedro Castillo seguirá en el penal de Barbadillo luego de que la Corte Suprema de Justicia de ese país rechazara su pedido de revisión de prisión preventiva, medida cautelar que cumple tras ser derrocado por un presunto intento de golpe de Estado.
El Juzgado Supremo de Investigación Preparatoria del máximo tribunal señaló, a través de la red social X, que el “Poder Judicial rechaza pedido del expresidente Pedro Castillo para revisar de oficio la prisión preventiva de 36 meses dictada en su contra tras ser investigado por los delitos de organización criminal, colusión y tráfico de influencias”.
La decisión fue tomada por el juez Juan Carlos Checkley, quien explicó que la investigación en las entidades Ministerio de Vivienda, Petroperú SA y Provías es compleja; “por lo que existiría peligro de fuga y obstaculización del proceso por parte de Castillo”, de acuerdo al reporte del diario limeño La República.
El exgobernante es investigado por la Fiscalía Nacional por el presunto delito de rebelión y conspiración en la modalidad de abuso de autoridad y contra la tranquilidad pública en agravio al Estado.
La hipótesis del Ministerio Público se basa en el mensaje a la nación que dio el expresidente el 7 de diciembre de 2022, al anunciar el cierre del Congreso, llamado a elecciones generales y nuevas reformas en el sistema judicial.
Además, se argumenta que Castillo, para lograr su cometido, se comunicó con el comandante general de la Policía Nacional del Perú, Raúl Alfaro Alvarado, y le pidió que interviniera el Parlamento y procediera con la detención de la entonces fiscal de la Nación, Patricia Benavides, actualmente separada del cargo.