La boda del príncipe Harry con Meghan Markle se ha visto empañada con diferentes versiones respecto de la posible ausencia del padre de la actriz en la ceremonia del sábado. El palacio de Kensington anunció la noche del lunes que Meghan estaba atravesando "un momento profundamente personal", sin llegar a confirmar la ausencia del padre, anunciada por la prensa poco antes.
La polémica se desató luego que el diario Daily Mail informara el domingo que el padre de Markle había acordado realizar una sesión de fotos con un paparazzi. En las fotografías publicadas por el tabloide se lo ve junto al fotógrafo probándose un traje de boda y leyendo historias sobre su hija en los periódicos. El Palacio de Kensington se limitó a decir que "ella y el príncipe Harry piden de nuevo comprensión y respeto a (Meghan) Markle en esta difícil situación".
Las imágenes de Thomas Markle las tomó una agencia de Los Angeles y se vendieron por US$ 100.000, según el Daily Mirror. De acuerdo con TMZ, las razones de Thomas Markle para no asistir fueron que tuvo un infarto y que además no quería avergonzar a su hija ni a la familia real.
La hermanastra de Meghan por parte de padre, que no está invitada a la boda, asumió la culpa por este episodio. Samantha Grant explicó en Twitter que la prensa había dado una mala imagen de su padre y le aconsejó dejarse tomar unas fotos para mejorarla.
TMZ señaló que Meghan lo había tratado de llamar el lunes, pero que él no se encontraba cerca del teléfono. Luego le envió un mensaje en el que le decía que lo quería, que estaba preocupada por su salud y que no estaba enojada con él.
Sin embargo, tras dos días de especulaciones, Thomas Markle dijo a TMZ que odia la idea de "perderme uno de los mayores momentos en la historia y caminar con mi hija al altar".
La revista Vanity Fair señala que Thomas Markle es muy tímido y que cuando supo que su hija se casaría con Harry se planteó la posibilidad de no llevarla al altar solo para evitar que todas las miradas se fijaran en él. A tal punto llega su fobia a las cámaras que decidió retirarse de Hollywood, donde ejercía como director de iluminación, debido a la presión que sufrió tras ganar un Emmy por su participación en la serie General Hospital. Es por eso que se fue a vivir a México, al pueblo costero de Rosarito.