Cuando faltan poco más de tres semanas para las elecciones presidenciales en Estados Unidos, Kamala Harris y Donald Trump están acelerando el paso para ganar el apoyo de los latinos en los estados claves, dado que son votantes con potencial para romper el estancamiento de las últimas encuestas. Ambos candidatos viajaron a Nevada y Arizona, estados indecisos -swing states-, donde los latinos representan más de una quinta parte del electorado y podrían ser decisivos para definir quién controlará la Casa Blanca.
El jueves pasado, la candidata demócrata participó en un foro abierto con votantes organizado por Univisión -una de las principales cadenas de televisión en español en EE.UU.- en Las Vegas, Nevada, como parte de la ofensiva mediática que emprendió la semana pasada para llegar a los votantes. En “Noticias Univisión Presenta: Latinos Preguntan, Kamala Harris Responde”, la candidata contestó preguntas de votantes latinos de todo el país sobre atención médica, vivienda, inmigración y economía.
Fue consultada por la respuesta de la administración Biden a los recientes huracanes y por su ascenso como candidata presidencial tras el paso al costado dado por el actual mandatario para ir a la reelección. Al final, le pidieron que dejara la política de lado y nombrara tres virtudes de su oponente. “Creo que Donald Trump ama a su familia, y creo que eso es muy importante. La familia es una de las cosas más importantes a las que se puede dar prioridad”, respondió, aunque reconoció que no conoce bien a su rival, ya que sólo lo vio una vez, en el debate que tuvieron el mes pasado.
Con la carrera presidencial muy ajustada en los siete estados clave, las campañas buscan atraer al electorado latino porque si bien este sector tradicionalmente ha apoyado a los demócratas, en los últimos años ha mostrado una inclinación hacia la derecha. Así lo confirmó una encuesta de The New York Times/Siena College publicada este domingo, que mostró que el apoyo a Kamala Harris entre los votantes hispanos está peligrosamente bajo para los demócratas, mientras que Donald Trump ha consolidado su popularidad entre este grupo.
La encuesta entre el probable electorado latino de todo el país concluyó que Harris obtuvo un desempeño inferior al de los últimos tres candidatos demócratas a la Casa Blanca y es vulnerable en una serie de temas importantes, entre ellos la economía, la inmigración y el crimen. Trump, que sorprendió a los demócratas hace cuatro años con su llamado a los latinos, particularmente a los hombres, sólo ha reforzado su control, aun cuando cierra su campaña con un mensaje marcadamente antiinmigrante.
La encuesta concluyó que sus ataques cada vez más intensos contra los inmigrantes no han llevado a los votantes latinos a apoyar a Harris. A pesar de su retórica antiinmigrante, dos tercios de los latinos creen que Trump no se refiere a ellos en sus críticas. La encuesta reflejó una división de género, con más hombres hispanos apoyando a Trump. Además, una parte significativa de los votantes latinos simpatiza con las políticas migratorias del republicano, como la construcción del muro y la deportación de inmigrantes ilegales, sobre todo entre los latinos nacidos en EE.UU.
La encuesta también reveló que Trump está ganando apoyo entre algunos votantes que eligieron a Biden en 2020. Además, entre los latinos más jóvenes, las políticas del republicano son vistas como más beneficiosas que las del mandatario demócrata. La economía es el tema principal para el 30% de los latinos, mientras que el aborto y la inmigración son preocupaciones secundarias. Sin embargo, muchos votantes latinos aún consideran al Partido Demócrata como su “hogar”, aunque sienten que no los ha ayudado directamente.
Otro sondeo de Telemundo, NBC News y CNBC publicado a fines de septiembre, reveló que Harris supera en intención de voto latino a su oponente republicano, pero tiene la menor ventaja de un candidato demócrata en las últimas cuatro elecciones de Estados Unidos. Así lo complementan las investigaciones de Pew Research Center, que indican que Barack Obama ganó el 71% del voto latino en 2012, pero este porcentaje cayó al 65% para Hillary Clinton en 2016 y al 59% para Joe Biden en 2020.
Según la encuesta hecha por dichos medios de comunicación, el apoyo a Harris entre los latinos era del 54%, frente al 40% de Trump en un sondeo con 1.000 votantes latinos registrados en EE.UU., realizado en inglés y en español entre el 15 y 23 de septiembre y con un margen de error de más o menos 3,1 puntos porcentuales. La ventaja de 14 puntos de Harris supera la que tenía Joe Biden antes de retirarse de la carrera por la reelección, aunque representa el margen más estrecho para un candidato demócrata desde 2012.
La encuesta muestra que el costo de la vida y la inflación, así como los trabajos y la economía, son los temas de mayor preocupación para los latinos, en línea con la tendencia general de EE.UU., y son esos los temas en los que Trump tiene mejor puntuación.
El think tank Pew Research Center estima que unos 36,2 millones de latinos estarán habilitados para votar este año, o alrededor del 15% del electorado, el doble de su proporción en 2000. En 2020, el grupo superó a la población afroamericana de Estados Unidos para convertirse en el segundo bloque de votación étnica más grande del país.
“El votante latino está surgiendo como el segmento de mayor crecimiento de la fuerza laboral obrera”, dijo Mike Madrid, consultor político republicano y autor de The Latino Century, al diario Financial Times. Como proporción del electorado, también sería mayor que el margen de victoria en cualquier estado clave, agregó. “No se necesitan grandes cambios. Un par de puntos es una cifra pequeña para una submuestra de sondeo, pero es tectónica en el mundo real”, señaló Madrid.
Por su parte, Trump asistió el sábado a una mesa redonda con votantes latinos en Las Vegas durante la tarde, donde se centró en la inmigración y la inflación. Allí, escuchó a Elías Trujillo, un exinmigrante indocumentado que ahora planea votar por él en las elecciones de 2024. Trujillo, ahora propietario de un restaurante y ciudadano estadounidense, compartió su historia y expresó su apoyo a las políticas económicas del republicano.
“Los hispanos, dicen que no se puede generalizar, pero yo creo que sí, tienen un espíritu emprendedor maravilloso y tienen... ¡Oh, tienen tanta energía! Relájense un poco, ¿de acuerdo? Relájense”, dijo Trump. “Tienen una gran ambición, tienen mucha energía, son muy inteligentes y realmente son emprendedores naturales”, elogió, según ABC News. En la mesa redonda también participaron Robert Unanue, CEO de Goya, la candidata al Congreso Mayra Flores y el candidato al Senado Sam Brown.
Más tarde, se dirigió a Coachella, California, donde habló sobre inmigración y trató de convencer a los votantes en este estado que suele ser demócrata para que apoyen su candidatura. Y este lunes, realizó un foro público en el complejo de eventos Greater Filadelfia Expo Center and Fairgrounds, ubicado en el suburbio de Oaks, Pennsylvania, con la esperanza de aumentar la participación entre sus partidarios.
Su compañero de fórmula, el senador de Ohio, JD Vance, viajaría a Minnesota, Illinois y Iowa este lunes, según consignó Univisión. Y este miércoles, el candidato republicano asistirá al mismo foro abierto de la cadena televisiva en el que participó Harris para responder preguntas del electorado latino.
Este lunes por la noche, Harris tenía programado realizar un mitin en el noroeste de Erie, una ciudad demócrata de Pennsylvania con aproximadamente 94.000 habitantes, rodeada de suburbios y áreas rurales con una notable presencia republicana. Esta región es vista como un barómetro confiable en el estado, con un electorado que tiende a ser moderado, de acuerdo con NBC News.
Allí, se centraría en la votación anticipada y visitaría una pequeña empresa de propiedad afroamericana en Erie para promover sus propuestas destinadas a ofrecer más oportunidades económicas a los hombres afroamericanos, mientras los demócratas buscan movilizar este bloque de votantes que ahora sería el tercero más grande en el país. Más temprano ese día, se reunió con líderes afroamericanos para discutir su nueva Agenda de Oportunidades para Hombres Negros.