El gobierno interino de Bolivia envió este miércoles un proyecto de ley al Congreso para que inicie el proceso hacia unas nuevas elecciones, aún sin fecha, ya que primero deben elegir a un nuevo órgano electoral.
"Este proyecto puede ser perfectible, quisiéramos, como gobierno, que se lo considere como un documento base para generar un consenso nacional", agregó.
Bolivia está inmersa en una compleja crisis tras la renuncia de Evo Morales a la presidencia, el día 10 de noviembre y su posterior viaje a México como asilado. La situación se recrudeció tras las elecciones del 20 de octubre que dio como ganador al líder indígena.
La presidenta interina de Bolivia anunció este miércoles que tiene previsto convocar por decreto elecciones si no logra un acuerdo con el Parlamento, donde tiene mayoría el partido de Evo Morales.
"Si Dios lo permite, hoy en horas de la mañana vamos a lanzar la convocatoria a elecciones como todo el país lo está demandando", dijo Áñez a los medios en La Paz a las puertas del Parlamento.
Su gobierno interino agotará "todas las instancias", pero "si la Asamblea no permite que lo hagamos de esa manera legal, pues buscaremos otro mecanismo", sentenció Añez.
La presidenta provisional indicó que "primero vamos a estar con lo más apegado a la Constitución, hemos elaborado un proyecto base".
La convocatoria de elecciones en Bolivia pasa porque la Asamblea Legislativa, en la que tiene mayoría de dos tercios el Movimiento al Socialismo (MAS) de Morales, nombre un nuevo órgano electoral, que tiene que llamar a una nueva cita con las urnas.
No obstante, existe el precedente en una crisis similar en 2005 con Eduardo Rodríguez Veltzé de presidente en que los comicios fueron convocados por decreto, una vía que podría utilizar Áñez.
El decreto que tiene preparado el gobierno interino de Bolivia "probablemente pueda ser corregido, consensuado o enriquecido por todos los sectores que están involucrados en la lógica de pacificar al país".
El conflicto en Bolivia desde los fallidos comicios del pasado 20 de octubre deja al menos 27 muertos y más de 700 heridos en actos violentos, según datos oficiales.
"De que elecciones va a haber en el país, sí, nosotros lo garantizamos", aseveró la presidenta provisional en una breve declaración a los medios.
Bolivia está sumida en uno de los conflictos más graves de su historia reciente, desde que el día después de las elecciones del 20 de octubre comenzarán las denuncias de fraude a favor de Evo Morales, que fue proclamado vencedor para un cuarto mandato consecutivo.
El 10 de noviembre la Organización de Estados Americanos advirtió en un informe graves irregularidades en los comicios y horas después Morales anunció su renuncia tras casi 14 años en el poder, forzado por las Fuerzas Armadas, para al día siguiente salir hacia México, donde está asilado.
La renuncia de Morales es calificada de "golpe de Estado" por varios Gobiernos y políticos latinoamericanos.
Otros países han reconocido al Ejecutivo interino de Jeanine Áñez, mientras que parte de la comunidad internacional ha instado al diálogo sin pronunciarse sobre la crisis política.