El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, pidió este sábado por la noche a la Asamblea Legislativa que decrete “hoy mismo” el régimen de excepción después de que las autoridades detuvieran a decenas de pandilleros de la banda criminal Mara Salvatrucha acusados de perpetrar al menos una veintena de homicidios desde el viernes por la noche.

El mandatario esgrimió esta ola de violencia para solicitar a los miembros del Congreso, controlado por el oficialismo, que se reúnan para “decretar hoy mismo régimen de excepción”, por el que se anulan libertades.

Ernesto Castro, presidente de la Cámara, convocó una sesión para tratar el pedido de Bukele para la noche del sábado.

La Constitución salvadoreña establece el régimen de excepción, por el que se suspenden algunas garantías establecidas, se puede aplicar “en casos de guerra, invasión del territorio, rebelión, sedición, catástrofe, epidemia u otra calamidad general, o de graves perturbaciones del orden público”.

Una ola de violencia sacude El Salvador, donde desde el viernes por la noche se han registrado “más de 20 homicidios y femicidios”, informó Ricardo Martínez, procurador adjunto para la Defensa de los Derechos Humanos, mientras que otras fuentes vinculadas a la seguridad pública elevaron a 30 los homicidios en el país.

La policía y el ejército de dicha nación mantenían el sábado un operativo en el que, según informó la Policía Nacional Civil (PNC), varios cabecillas de la Mara Salvatrucha (MS) fueron detenidos acusados de ser “responsables de los homicidios registrados en las últimas horas”.

Bukele promete investigar

“Desde ayer tenemos un nuevo repunte de homicidios, algo que habíamos trabajado tan duro por reducir. Mientras combatimos a los delincuentes en las calles, tratamos de descifrar lo que está pasando y quiénes están detrás financiando esto”, dijo el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, en un comunicado subido a Twitter por el presidente del Congreso, Ernesto Castro.

“Debo de darle gracias a Dios por permitirme enfrentar estos inimaginables retos; por darme esta enorme responsabilidad y por haberme escogido para ser su soldado específicamente en estos tiempos”, remachó el presidente.

Bukele reunió de urgencia a su equipo de seguridad. “A esta hora el gabinete de seguridad junto con el fiscal general se encuentran reunidos con el presidente @nayibbukele para tratar el tema del alza de homicidios reportado en la últimas horas”, informó en Twitter la PNC el sábado por la tarde.

El mandatario dijo que la Policía y la Fuerza Armada “deben dejar que los agentes y los soldados hagan su trabajo y deben defenderlos de las acusaciones de quienes protegen a los pandilleros”.

Bukele pidió a la Fiscalía “ser eficaz con todos los casos (de pandilleros que procese) y advirtió que estará pendiente de “los jueces que favorezcan delincuentes”.

Martínez hizo un llamamiento al gobierno y a las autoridades de seguridad pública a “redoblar los esfuerzos” para “prevenir e investigar todos los hechos de violencia y aplicar todo el pese de la ley, respetando el principio de inocencia y el debido proceso”.

El procurador pidió a la población “mantener la calma” y contribuir al fomento de “una cultura de paz” en el país.

En noviembre pasado el país sufrió otro repunte de homicidios que en tres días cobró la vida de unas 45 personas.

Las pandillas Mara Salvatrucha y Barrio 18, entre otras, tienen unos 70.000 miembros en El Salvador, más de 17.000 de ellos encarcelados, según las autoridades, y operan a través de homicidios, extorsiones, narcotráfico y otras actividades ilegales.

El Salvador cerró 2021 con 1.140 homicidios, un promedio de 18 muertes por cada 100.000 habitantes, menos de los 1.341 registrados en 2020 y la cifra más baja desde el fin de la guerra civil en 1992, según datos oficiales.