El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, instó este sábado a la comunidad internacional a detener el genocidio de Israel contra el pueblo palestino en Gaza y pidió a los líderes de los países árabes que convoquen “una cumbre de emergencia para detener esta cruel agresión contra el pueblo palestino y su causa”.
En una reunión crucial del Comité Ejecutivo de la Organización de Liberación de Palestina (OLP) celebrada en la sede presidencial en Ramallah, la autoridad subrayó los esfuerzos de los líderes palestinos en sus actividades diplomáticas con los líderes mundiales y el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas “para que detenga la agresión, proporcione ayuda humanitaria, impida desplazamiento y cesar los ataques de los colonos israelíes y las fuerzas de ocupación en Jerusalén y Cisjordania”.
A este respecto, el líder palestino lamentó que, “a pesar de una abrumadora mayoría de votos en la Asamblea General de la ONU, las fuerzas de ocupación israelíes respondieron con una invasión terrestre y niveles sin precedentes de bombardeos, destrucción y pérdida de vidas”.
Abbas reiteró además su petición a la comunidad internacional para que “ejerza presión sobre Israel para detener el derramamiento de sangre palestino” y animó al pueblo palestino a “permanecer unido, demostrando unidad y resistencia contra esta atroz guerra perpetrada por el Ejército israelí”.
Al dirigirse a los líderes de los países árabes, el presidente palestino demandó también que se ponga el foco en los desafíos regionales e internacionales y que se trabaje para permitir que los palestinos permanezcan en su tierra, poniendo fin a la ocupación de su Estado, con Jerusalén como capital.
Por su parte, el Comité Ejecutivo de la OLP agradeció la solidaridad de la comunidad internacional en general y de los países árabes en particular con el pueblo palestino, solicitando una expansión de estos esfuerzos, así como la preservación de la unidad nacional.
Asimismo, el comité se ha sumado a la petición de una cumbre árabe de emergencia para redoblar los esfuerzos regionales e internacionales para detener la agresión y ha condenado el desplazamiento forzado del pueblo palestino.
En esta línea, el organismo reafirmó sus prioridades en el actual conflicto, que pasan por el cese inmediato de la agresión y aplicación de un alto el fuego auspiciado de manera coordinada por agentes internacionales, regionales y la OLP, la apertura de corredores humanitarios para cubrir las necesidades básicas del pueblo palestino y el fin de los desplazamientos forzados de los palestinos dentro y fuera de Gaza.