El primer ministro interino de Haití, Claude Joseph, ha anunciado la declaración del estado de sitio tras el asesinato del presidente, Jovenel Moise, que ha muerto este miércoles de madrugada durante un asalto a su residencia privada en Puerto Príncipe.
Joseph ha dado un discurso a la nación al término de un Consejo de Ministros extraordinario para actualizar las medidas en un momento que él mismo ha reconocido como “difícil” y en el que confía en poder garantizar la “continuidad” del Estado.
El estado de sitio, que la legislación haitiana plantea en principio para un periodo inicial de 15 días, sitúa a las Fuerzas Armadas como máximas garantes de la seguridad e implica la instauración de tribunales militares. También abre la puerta al control de los medios de comunicación, según un reciente análisis del periódico ‘Le Nouvelliste’.
En este sentido, Joseph ha instado a todas las partes a unirse a esta misma “batalla” para que “gane” la democracia, en un aparente intento por evitar el vacío de poder que podría generarse tras la ausencia de un jefe de Estado y la falta de renovación del Parlamento.
El artículo 149 de la Constitución estipula que en caso de ausencia del presidente “por dimisión, destitución o en caso de incapacidad física o mental permanente”, corresponde al Consejo de Ministros, “bajo la presidencia del primer ministro”, ejercer el poder ejecutivo hasta la elección de un nuevo jefe de Estado.
La Carta Magna, pendiente precisamente de renovación, estipula un plazo de entre 60 y 120 días para avanzar en esta renovación, si bien establece una excepción, en el caso de que el presidente estuviese en su último año --como es el caso de Moise-- la Asamblea Nacional podría reunirse para elegir a un mandatario de forma “provisional”, informa ‘Haiti Libre’.