Este lunes un ataque aéreo israelí en el sur de Líbano mató a Wissam Hassan al-Tawil, alto comandante de la fuerza de élite Radwan, encargada de operaciones especiales del grupo Hizbulá y cuya principal misión es infiltrarse en el territorio de Israel. Se trata del militante de mayor rango del grupo armado que ha sido asesinado desde el ataque de Hamas del 7 de octubre al sur de Israel que desencadenó la guerra en Gaza, y que también ha derivado en combates entre las fuerzas hebreas con Hizbulá.
Wissam Hassan al-Tawil, conocido como “Jawad”, era el jefe adjunto de una unidad de la fuerza de élite Radwan y desempeñó un papel importante en los recientes enfrentamientos de Hizbulá con el Ejército israelí. El comandante “desempeñaba un rol de primer plano en la dirección de las operaciones militares en el sur”, explicó un funcionario de seguridad a la agencia de noticias AFP, quien pidió el anonimato por motivos de seguridad.
Hasta ahora, no está claro si Jawad fue asesinado como parte de los intercambios de disparos entre las Fuerzas de Defensa de Israel e Hizbulá o si él fue un objetivo específico. Según medios estatales libaneses, al-Tawil se encontraba en un vehículo que fue atacado por aviones no tripulados israelíes en el área de Khibert Selm de la localidad de Bint Jbeil, en el sur de Líbano.
El ataque provocó que el automóvil se desviara de la carretera y se incendiara. “Este es un golpe muy doloroso”, dijo una de las fuentes de seguridad a Reuters. Otra aseguró: “Ahora las cosas se recrudecerán” en la frontera libanesa-israelí.
Tras confirmar su muerte, Hizbulá ha dicho que al-Tawil “ha caído mártir en el camino a Jerusalén”, según recogió la cadena de televisión libanesa Al Manar, vinculada al grupo armado.
La fuerza de élite Radwan, de la que al-Tawil era alto comandante, fue creada por Hizbulá en los años 90 y bautizada en honor a Imag Mughniyeh -alias “Radwan”-, quien fue “número dos” del grupo y líder de la rama de Inteligencia de la formación hasta su muerte en un atentado en Siria en 2008.
Alí Damush, vicepresidente del Consejo Ejecutivo de Hizbulá, manifestó este mismo lunes que “la resistencia no permitirá que el enemigo cruce las ‘líneas rojas’, rompa las normas e imponga nuevas ecuaciones”. De acuerdo con Jamal Ghosn, comentarista político de Beirut, Hizbulá podría tomar represalias dentro de las próximas 24 horas. Esta contraofensiva podría ser parte de las operaciones en curso que se están llevando a cabo o podría ser un evento único, señaló el analista tras el asesinato del alto comandante al-Tawil, en declaraciones a la cadena qatarí Al Jazeera.
Los ataques-contraataques se han intensificado desde que Saleh Al-Arouri, el “número dos” de Hamás, fue asesinado en Beirut el martes pasado. En lo que calificó como un “respuesta inicial” a este hecho, Hizbulá lanzó decenas de cohetes contra Israel este fin de semana.
“Como parte de la respuesta inicial al asesinato del gran líder, el jeque Saleh al-Arouri (...) la resistencia islámica atacó la base de control aéreo de Meron con 62 misiles de varios tipos”, aseguró Hizbulá, aliado de Irán y de Hamas, en un comunicado citado por la agencia de noticias AFP.
El asesinato de al-Tawil se da mientras el secretario de Estado norteamericano, Antony Blinken, se encuentra en Medio Oriente intentando evitar el estallido de una guerra más amplia en la región.
En ese sentido, el ministro de Defensa de Israel, Yoav Gallant, aseguró que el Ejército israelí puede “copiar y pegar” en la capital de Líbano, Beirut, la destrucción causada por la ofensiva contra la Franja de Gaza, en medio del repunte de las tensiones con Hizbulá, con el que lleva cerca de tres meses protagonizando enfrentamientos en la frontera.
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