Su hijo cree que sufrió un “cortocircuito” mental. Y es que no encuentra otra explicación para la acción de su progenitor. Juraj Cintula, escritor de 71 años miembro de la Asociación Eslovaca de Escritores y fundador de un grupo literario, y que en el pasado había trabajado como guardia de seguridad, fue imputado como el presunto autor de los disparos que dejaron gravemente herido al primer ministro eslovaco, Robert Fico.
Los medios locales señalan que Cintula es residente de la pequeña ciudad occidental de Levice, en el suroeste del país. Según el diario eslovaco Dennik N, es escritor y miembro fundador del club de literatura DÚHA. Esta última entidad emitió un comunicado en el que se “distancia categóricamente del comportamiento, las opiniones y las acciones de Juraj Cintula” y muestra su indignación por su “brutal acto”.
Asimismo, la Asociación Eslovaca de Escritores ha registrado a Cintula como miembro desde 2015, sin embargo, ahora han tratado de distanciarse de él publicando en un comunicado: “Expresamos nuestra indignación por un acto tan brutal que no tiene comparación en la historia de Eslovaquia”, consigna Euronews.
Cintula ha escrito tres poemarios y publicado dos novelas tituladas “El mensaje del sacrificio” en 2010 y “Efata” en 2015, según la página de Facebook del club literario. Esta última es una novela sobre la comunidad gitana de Eslovaquia.
Algunas de sus obras literarias revelan opiniones racistas y xenófobas, especialmente sobre la comunidad gitana de Eslovaquia, sometida tradicionalmente a políticas de discriminación y segregación. En uno de sus textos, publicado en el libro Efata denuncia que “nunca ha habido tantos gitanos en Europa como ahora”.
Cintula era un activo bloguero que escribía sobre política, como hacía en su perfil de Facebook, donde no ocultaba su animadversión hacia el actual mandatario eslovaco. De hecho, tras ser detenido, justificó su agresión a Fico en que no estaba de acuerdo con las políticas del gobierno y denunció sus “ataques” a la Radio y Televisión de Eslovaquia.
Antiguo empleado del servicio de seguridad privada (SBS), por lo que estaba en posesión legal de un arma, en su faceta política también llegó a crear en 2016 un movimiento social llamado “Movimiento contra la violencia”, además de estar vinculado con un grupo paramilitar ultranacionalista y prorruso.
“El mundo está lleno de violencia y armas, como si la gente hubiera enloquecido”, dijo entonces el autor de los disparos, Jarek Cintula, en un mensaje grabado al poner a andar su plataforma.
Sin embargo, en una publicación de 2022 para el “Movimiento contra la Violencia”, Cintula condenó con vehemencia la invasión rusa de Ucrania y desestimó las afirmaciones del Kremlin sobre la hermandad eslava entre las dos naciones: “¿Qué hermandad eslava?”, escribió. “Él es sólo el agresor y el atacado”.
Un amigo de Levice, hablando con Markiza TV, reveló que participaron en debates políticos y notaron diferencias en sus puntos de vista sobre Rusia. “Me inclino más por Rusia. Él tenía opiniones contrastantes”, comentó el amigo a Telegraph.
Además, Cintula aseveró que la democracia eslovaca estaba amenazada por la privatización de bienes del Estado tras la caída de la dictadura comunista y que, denunció, pasaron a manos de “oligarcas y ricos que compran a los representantes políticos”.
Citado por el diario El Heraldo, el periodista de investigación húngaro Szabolcs Panyi, asegura que el agresor de Fico está vinculado con Slovenski Branski, un grupo paramilitar eslovaco prorruso.
Panyi es miembro de VSquare, un prestigioso centro de investigación periodística, muy activo en la denuncia de la influencia y los vínculos de Rusia con gobiernos ultranacionalistas como Eslovaquia o Hungría.
En un mensaje del 2016 en la página de Facebook de Slovenski Branski, se puede ver a Cintula participando en un acto de ese grupo, ya desaparecido, que simpatizaba con el político neonazi eslovaco Marian Kotleba, condenado en 2020 a cuatro años de cárcel.
En aquel mensaje en Facebook, Cintula reclama la existencia de milicias armadas que defiendan a los europeos de la llegada de “cientos de miles de migrantes”.
Los informes preliminares sugieren que Cintula no mostraba ningún indicio de trastorno mental, y que no había hecho público su plan de atentado en las redes sociales.
Según las primeras investigaciones policiales Cintula llevaba el arma de forma legal y antes de abrir fuego llamó la atención de Fico al grito de: Robo (Robert) ven aquí”. En el momento en el que el primer ministro se acercó para darle la mano, le disparó, detalla el diario El Mundo.
Y lo hizo cinco veces, según un video difundido por los medios eslovacos. El atacante fue neutralizado en el acto por los guardaespaldas de Fico, pero varias horas después del incidente, el arma del agresor seguía visible cerca de la Casa de la Cultura.
En sus primeras declaraciones en comisaria, Cintula, afirmó no estar de acuerdo con la política del gobierno y opinó que medios de comunicación están siendo liquidados, destaca El Mundo.