Luego de que el gobierno de España vetara el nombramiento de cuatro ex consellers - dos detenidos y dos en Bélgica - como parte del gabinete del presidente catalán Quim Torra, el president de la Generalitat decidió que ellos no formaran parte de su gabinete y presentó cuatro consejera en su lugar y con ello se desbloqueó el gobierno catalán.
Los ex miembros del gobierno catalán era Jordi Turull y Josep Rull (detenidos) y los cesados Toni Comín y Lluís Puig (en Bélgica). Sin embargo, el gobierno de Mariano Rajoy impugnó la decisión de Torra por considerarla "provocadora" y no permitió que fuera publicada en el Diari Oficial de la Generalitat de Catalunya (DOGC) y no ello, no permitió que el nuevo gobierno se haga efectivo.
La publicación de los nombramientos es facultad en estos momentos del gobierno español porque gestiona las competencias de la administración regional de Cataluña desde el 27 de octubre de 2017, cuando Rajoy destituyó, amparado en la Constitución, a todo el anterior gobierno independentista catalán de Puigdemont.
La formación de un nuevo gobierno autonómico sin cargas judiciales posibilitará, además el levantamiento del artículo 155 - aplicado el mismo día que Cataluña declaró unilateralmente su independencia - como estableció el senado español.
Esto sería puesto en marcha una vez que el ministros tomen posesión de sus cargos.