Ayer el nuevo gobierno del Líbano del primero ministro saliente Saad Hariri presentó su nuevo gabinete luego de más de ocho meses de negociaciones en medio de divisiones políticas, entre las que se destaca que por primera vez una mujer tomará el mando del Ministerio del Interior.
Con 30 ministerios, el premier del Líbano integró en su cartera a cuatro mujeres, de los cuales entre ellas se encuentra la primera ministra mujer del Interior, Raya al Hassan.
Junto con ella, otras tres mujeres ocuparán carteras ministeriales. La ministra para Desarrollo Administrativo, May Chidiac; Violette Khairallah Safadi, ministra para Asuntos de las Mujeres, y Nada Boustany, ministra de Energía.
Raya Haffar El-Hassan, que pertenece a la Corriente del Futuro liderada por Hariri, siempre ha trabajado de cerca y al interior del gobierno libanés. Entre noviembre de 2009 y junio de 2011, fue ministra de Finanzas, también la primera vez que una mujer tomaba esa cartera.
Anteriormente fue asesora del ministerio de Economía y Comercio, formando una dupla con Fleyhane-ElHassan, con quien creó la Ley de Seguridad Alimentaria y un texto sobre la protección del consumidor, detalla el medio francés Le1.
En los 90, supervisó la implementación de las reformas de gestión de gastos en el Ministerio de Finanzas, detalla Bloomberg, y se desempeñó como Directora de Proyectos en la Oficina del Primer Ministro Fouad Siniora. En esa oportunidad trabajó en la elaboración del Programa de Reforma Económica y Social del Gobierno.
Está previsto que el nuevo gabinete se reúna este sábado para poner fin a la extensa pausa de gobierno. Hariri aseguró en rueda de prensa que el nuevo Gobierno "tendrá que hacer frente a numerosos retos económicos y sociales", a los que se suman "la situación regional y las amenazas israelíes", en alusión a las recientes fricciones con el país vecino.
"El Gobierno tiene una agenda que no puede retrasarse. Las soluciones no pueden esperar y es necesario un programa claro y reformas atrevidas y desarrollar leyes", destacó el primer ministro, que, según la Constitución libanesa, debe ser un musulmán suní.