Para marcar sus primeros 100 días en el poder, está previsto que el Presidente brasileño Jair Bolsonaro encabece hoy un evento en el Palacio de Planalto para presentar un balance de la lista de objetivos de su administración. Durante la jornada, según afirmó su jefe de gabinete, Onyx Lorenzoni, también se espera que se anuncien las nuevas metas a ser alcanzadas hasta final de este año.

"Los retos de Bolsonaro a partir de ahora estarán sobre todo en avanzar con la idea de las reformas, en especial la de las pensiones", comenta a La Tercera Paulo Afonso Velasco Júnior, cientista político de la Universidad del Estado de Río de Janeiro (UERJ).

Pero para cumplir su ambicioso plan de reformas, el Presidente brasileño se verá obligado a cambiar su relación con el Congreso, sostienen los expertos. Hasta ahora, explica Thomaz Favaro, analista brasileño de la consultora de riesgos políticos Control Risks, "el gobierno optó por no formar una coalición amplia en el Congreso, prefiriendo negociar la aprobación de leyes caso por caso con distintos aliados sin tener que ceder puestos en el Ejecutivo". "Esta estrategia acabó generando una serie de fricciones con las demás fuerzas políticas en el Congreso, lanzando dudas sobre la capacidad del gobierno de aprobar medidas", señala Favaro a La Tercera.

Por ello, sostiene el analista de Control Risks, "el desafío de ahora en adelante es establecer una relación más constructiva con el Legislativo para lograr la aprobación de importantes medidas económicas, como la reforma de pensiones". "Y si (Bolsonaro) no consigue negociar, no logrará aprobar la reforma, por lo menos no la reforma que han enviado al Parlamento", agrega Velasco Júnior.

Con todo, el "filósofo" de Bolsonaro, Olavo de Carvalho, se muestra pesimista. "Si todo continúa como está, ya está mal. No necesita cambiar nada para quedar mal. Es sólo continuar así. Seis meses más, y acabó", dijo.